Lula recibirá a Macron en la Amazonía brasileña, primera etapa de su viaje a Brasil
Brasilia, 19 mar (EFE).- El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, recibirá la semana próxima a su homólogo francés, Emmanuel Macron, en la ciudad amazónica de Belém, donde el líder galo iniciará una visita de tres días al país, informaron este martes fuentes oficiales. Macron llegará a Belém, que en 2025 será sede de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP30), donde será recibido por Lula el 26 marzo para una primera escala de fuerte contenido medioambiental, según confirmó este martes la Presidencia brasileña. Lula ya ha anticipado su deseo de que los «líderes del mundo» conozcan la Amazonía a fin de que «comprendan mejor» los desafíos que implica la protección de esa región, que constituye el mayor pulmón vegetal del planeta. Después de una primera jornada en Belém, Macron se desplazará a Río de Janeiro, donde el miércoles 27 visitará, acompañado por Lula, un complejo naval situado en el municipio de Itaguaí, corazón de un amplio programa de construcción de submarinos que se lleva adelante con cooperación francesa. El acuerdo que dio lugar a ese programa de cooperación, que incluye la construcción de cinco submarinos, entre ellos uno de propulsión nuclear, fue firmado en 2009, durante el segundo mandato de Lula y en el marco de una visita del entonces presidente francés, Nicolas Sarkozy. Macron se trasladará luego a São Paulo, donde el mismo miércoles participará en un evento empresarial, y el jueves 28 tendrá una reunión de trabajo en Brasilia con Lula, quien en un gesto poco usual le recibirá en el Palacio de la Alvorada, residencia oficial de la Presidencia. En la agenda de la visita de Macron, además de cuestiones bilaterales e internacionales, fuentes oficiales han dicho que deberá ser discutido el estancamiento de las negociaciones para un acuerdo comercial entre la Unión Europea (UE) y el Mercosur, que Brasil integra junto con Argentina, Uruguay y Paraguay. Las negociaciones, concluidas en 2019, han caído en un punto muerto, entre otras razones por la fuerte oposición del Gobierno de Francia, que alega cuestiones medioambientales y sufre presiones de su sector agropecuario, que rechaza un posible acuerdo con el Mercosur. EFE ed/cms/pddp