Macron deja Marruecos con acuerdos económicos cruciales y su apoyo a Rabat en el Sáhara
Rabat, 30 oct (EFE).- La primera visita de Estado a Marruecos del presidente francés, Emmanuel Macron, se cerró este miércoles con acuerdos económicos cruciales por 10.000 millones de euros y la escenificación del apoyo de París a la soberanía marroquí sobre el Sáhara Occidental.
Acompañado de su esposa, Brigitte Macron, el presidente galo fue recibido con honores por Mohamed VI y los miembros de la familia real, en una visita que puso fin a casi tres años de crisis diplomática y ha tenido como puntos álgidos los acuerdos económicos y el discurso dado por Macron ante el Parlamento.
La primera dama mantuvo una agenda separada del presidente -inauguró el Gran Teatro de Rabat- y coincidió con su marido en la cena de gala dada este martes por el monarca, a la que asistieron personalidades del mundo cultural, deportivo y académico franco-marroquí.
En su último día de visita, antes de volver a Francia, el presidente francés -que acudió a Rabat con nueve ministros y una delegación de 120 personas- participó en un foro sobre seguridad alimentaria y tuvo un encuentro con la comunidad francesa.
Más «resultados» en inmigración
«Con Mohamed VI hemos decidido escribir juntos uno nuevo libro», dijo este martes Macron en su discurso de más de media hora ante las dos cámaras marroquíes, una alocución que sirvió para poner voz a su nueva posición sobre el Sáhara Occidental y reafirmar su apoyo a la soberanía marroquí sobre este territorio disputado.
Este giro se tradujo también en el anuncio de que Francia actualizará el mapa de Marruecos para incluir la excolonia española y extenderá la acción consultar francesa a este territorio.
El presidente francés insistió en que su nueva posición «no es hostil a nadie», en alusión velada a Argelia, excolonia de París y principal rival de Rabat en el Magreb.
Macron llamó en su discurso a la necesidad de «resultados» en inmigración irregular, un asunto, dijo prioritario para los franceses, y luego su ministro del Interior, Bruno Retailleau, aseguró que Rabat y París mejorarán la «readmisión» de migrantes irregulares a Marruecos.
Francia se lleva el alta velocidad a Marrakech
La última vez que Macron estuvo en Marruecos fue en 2018 para inaugurar la línea Tánger-Casablanca de alta velocidad y ahora deja Rabat con el anuncio de que el segundo tramo hasta Marrakech -por 1.800 millones de euros- será para la misma empresa francesa, Alstom, que se ha impuesto a otras como las españolas Talgo y Caf.
La línea cubrirá 400 kilómetros, hará el trayecto Tánger-Marrakech en 2 horas y 40 minutos (en lugar de 7) y estará operativa antes de la Copa del Mundo 2030.
Este es uno de los 40 acuerdos comerciales e inversiones, por valor de 10.000 millones de euros, firmados entre Francia y Marruecos en ámbitos clave para Rabat como la desalación, las energías renovables, el agua, la educación y la innovación.
Otros engloban la construcción en Rabat por parte de Veolia de la mayor desaladora de África, que superará a la que está construyendo la española Acciona en Casablanca.
Además, Engie rubricó con la compañía estatal marroquí OCP (líder mundial en fosfatos) un acuerdo de 3.500 millones de euros para energías renovables y otro con TotalEnergie de 2.000 millones para producir hidrógeno verde. EFE
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