Manifestación nacionalista en Polonia por la Fiesta de la Independencia

Una marcha de varios miles de personas atravesó el sábado el centro de Varsovia, en una manifestación patriótica organizada por la extrema derecha a la que asistieron numerosos polacos apolíticos.
El presidente del Consejo Europeo y ex primer ministro polaco, Donald Tusk, a quien el Gobierno polaco considera su archienemigo, participó en la parte oficial de la Fiesta de la Independencia, que conmemora el renacimiento del Estado polaco en 1918.
Por la tarde, jóvenes vestidos de negro, pero también familias y personas mayores desfilaron a lo largo de unos tres kilómetros, en medio de un bosque de banderas rojas y blancas, petardos y bengalas de colores.
El lema oficial de la convocatoria era «Queremos a Dios», una expresión que recuerda al canto católico que en ocasiones se interpreta, en la actualidad, como un rechazo al islam.
Además de los clásicos «Dios, honor y patria» y «Gloria a los héroes», también se escucharon lemas xenófobos: «Polonia pura, polonia blanca», «Largaos con los refugiados» o «A golpe de martillo, a golpe de hoz, acabemos con la gentuza roja», este último, entendido como anticomunista y antirruso.
Uno de los oradores que animaba la concentración afirmó que «la cultura cristiana es superior a la cultura islámica».
Sin embargo, los participantes entrevistados por la AFP negaron toda motivación política o religiosa.
«Esta marcha no está hecha para apoyar al Gobierno, la mayoría de nosotros no tenemos ninguna opinión política», dijo un obrero de 43 años llegado desde Piaseczno, cerca de Varsovia. «Simplemente, viniendo aquí, siento que pertenezco a la nación, me siento orgulloso de ser polaco».
Una joven manifestante, cocinera en un hotel y que regresó hace poco de Reino Unido, donde pasó tres años, aseguró que no tenía «ningún vínculo con el ONR o la Juventud Gran Polonia [organizadores de la marcha, de extrema derecha]» y que había acudido «para sentirme polaca de nuevo».
También se celebraron en Varsovia otras dos manifestaciones, menos numerosas, organizadas por grupos antifascistas y partidos de la oposición.
«Me manifiesto contra el fascismo que se expande por el país», indicó a la AFP una joven. «Tengo un hermano adoptivo de piel negra. Me ha dicho que no volverá aquí, le insultaron unos desconocidos».