Muere escritora japonesa que cobijó a Fujimori en su exilio y propuso crear un ‘apartheid’
Tokio, 4 mar (EFE).- La escritora japonesa Ayako Sono, recordada además de por su prosa por dar cobijo al expresidente peruano Alberto Fujimori durante su exilio y por cosechar titulares por proponer la creación de un ‘apartheid’ como modelo de control para la inmigración en Japón, ha muerto a los 93 años.
Sono falleció el pasado 28 de febrero en un hospital de Tokio por causas naturales, según informó el diario japonés Nikkei.
Nacida bajo el nombre de Chizuko Machida en el barrio especial de Katsushika de Tokio el 17 de septiembre de 1931, Sono fue una de las escritoras católicas más relevantes del país asiático y formó parte de la denominada Tercera Generación de escritores de posguerra, entre los que se encuentran figuras como Shusaku Endo (1923-1996).
Ninguno de sus padres eran cristianos, pero Chizuko se convertiría al catolicismo tras asistir al colegio del Sagrado Corazón de Jesús de la capital japonesa.
En 1948 sería bautizada en la capilla del centro escolar bajo el nombre Mary Elizabeth Chizuko, que dejaría atrás un año después por el de Ayako Sono, pseudónimo que adoptaría para escribir en la revista ‘La Mancha’ ante el temor de que su padre, gerente de una empresa de caucho, no aceptase su interés por escribir ficción.
Su debut en el mundo literario llegaría cuando tenía 23 años con ‘Enrai no kyakutachi’ (Visitantes de lejos, 1954), que retrataba a las fuerzas de ocupación estadounidenses desde la perspectiva de una intérprete japonesa.
La obra, publicada un año después de casarse con Shumon Miura (1926-2017), compañero en la revista ‘Shin-Shicho’ (Nuevo Pensamiento), donde también participó, fue nominada para el prestigioso premio literario Akutagawa y consagraría la reputación de Sono como escritora prometedora.
Además de ser una novelista de renombre, a nivel internacional Sono era recordada por recibir en el año 2000 en su casa al expresidente peruano Alberto Fujimori durante su exilio.
De ideología conservadora, Sono fue asesora del fallecido ex primer ministro Shinzo Abe y hace una década acaparó titulares a nivel global por proponer la creación de un ‘apartheid’ como modelo de control para la inmigración en Japón, en un momento en el que el país comenzaba a abrir más sus restrictivas fronteras por necesidad ante el constante descenso de la mano de obra.
Reconocida como Persona de Mérito Cultural en el país asiático en 2003, Sono presidió entre 2005 y 2017 la Nippon Foundation, una organización sin ánimo de lucro con sede en Tokio que ofrece subvenciones, y en años recientes realizaría multitud de actividades de asistencia social en países en desarrollo. EFE
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