Muere un palestino por disparos en una redada de Israel en Tulkarem, norte de Cisjordania

Jerusalén, 24 dic (EFE).- Un joven palestino identificado como Fathi Said Odeh Salem murió este martes por un disparo de las tropas israelíes, que durante la noche llevaron a cabo una redada en el campamento de refugiados de Tulkarem, en el noroeste de Cisjordania, según la agencia local de noticias Wafa.

El medio apunta que Awda Salem recibió una herida crítica cuando se encontraba en el barrio de Al Hadaida del campamento, la cual acabó con su vida poco después, así como que el Ejército evitó que las ambulancias se acercaran al fallecido abriendo fuego contra ellas.

«Nuestros luchadores, junto a los luchadores de nuestro pueblo, siguen enfrentándose a las fuerzas de la ocupación en los frentes de combate del campamento de Tulkarem, y atacan a las fuerzas de infantería y sus vehículos militares con pesadas ráfagas de balas», anunciaba la Yihad Islámica Palestina esta madrugada, tras horas de choques con las fuerzas israelíes.

En varias ocasiones, el grupo islamista aseguró haber detonado explosivos contra los soldados, si bien el Ejército no hizo comentarios sobre la redada ni reportó víctimas en los combates.

Vídeos grabados dentro del campamento de refugiados muestran cómo el Ejército entró al área con excavadoras que utilizó para destruir infraestructuras y viviendas, práctica habitual durante estas redadas que las fuerzas armadas justifican alegando que eran estructuras vinculadas a los milicianos.

Según Wafa, las excavadoras destruyeron tanto propiedades públicas como privadas, afectando a tiendas, casas, vehículos y los muros de la mezquita Al Salam. Además, las demoliciones afectaron a la red de agua y eléctrica del campamento de refugiados, provocando cortes de luz.

Tulkarem y sus campamento de refugiados, así como el campamento vecino de Nur Shams, es uno de los bastiones de los milicianos de Yihad Islámica en Cisjordania junto a Yenín, donde desde hace tres semanas los choques los protagonizan los islamistas y las fuerzas de seguridad de la Autoridad Nacional Palestina.

Allí, los choques entre las fuerzas del Gobierno palestino y las milicias se han cobrado varias víctimas, entre ellas un líder de la brigada local, Yasid Yaisah.

Por otro lado, ayer fue enterrado el teniente Saher Farouk Juma Arhil, miembro de las fuerzas de seguridad palestinas que murió en combate en Yenín.

Esta madrugada también sufrió una redada del Ejército israelí el campamento de refugiados de Balata, junto a Nablus, también en el norte.

«Los equipos de la Media Luna Roja lidian con dos heridos por la redada al campamento de Balata: un joven con metralla de bala ha sido llevado al hospital, y una mujer de 49 años que fue agredida y llevada al hospital», anunció a primera hora de la mañana la Media Luna Roja Palestina.

Wafa informó del arresto de un joven identificado como Kamal Abu Muslim, cuya pertenencia a algún grupo armado aún no ha trascendido, en el barrio de Al Tirawi del campamento.

Cisjordania ocupada vive su mayor espiral de violencia desde la Segunda Intifada (2000-05), y en lo que va de 2024 al menos 482 palestinos han muerto en el territorio por fuego israelí, la mayoría milicianos de los campamentos de refugiados, pero también civiles, incluidos al menos 74 menores, según el recuento de EFE.

Desde el 7 de octubre de 2023 han muerto unos 800 palestinos en incidentes violentos con Israel -más de 168 menores-, principalmente por fuego de tropas, pero una decena de ellos a manos de colonos.

Del lado israelí, han muerto este año 40 personas: 16 uniformados y 24 civiles, diez de ellos colonos (tres menores). La mayoría en ataques perpetrados por palestinos, pero al menos cuatro soldados murieron durante incursiones militares en Cisjordania.EFE

pbj/rml