Nacionalista flamenco De Wever logra acuerdo de coalición para formar gobierno en Bélgica
(Actualiza con más datos y declaraciones)
Bruselas, 31 ene (EFE).- El nacionalista flamenco Bart De Wever logró este viernes alcanzar un acuerdo de coalición con los cinco partidos que formarán el nuevo gobierno de Bélgica, más de siete meses después de las elecciones del 9 de junio de 2024.
«Alea iacta est (la suerte está echada, en latín)», escribió De Weber en sus redes sociales para anunciar el acuerdo de coalición para un nuevo gobierno federal belga; una frase que acompañó con el signo de la victoria y una foto de él con el rey Felipe de Bélgica esta noche en el Palacio Real.
Según informó en un comunicado la Casa Real, el monarca recibió en audiencia en el Palacio Real de Bruselas a De Weber, quien le informó sobre el acuerdo de gobierno alcanzado entre los socios de la futura coalición.
La misión que el rey le había encargado para intentar lograr una coalición «se prolongará hasta el nombramiento del nuevo gobierno» y «la fecha de la toma de posesión del primer ministro y de los miembros del Gobierno se anunciará más adelante», señaló la Casa Real en su nota.
Este pacto allana el camino para que De Wever sea el próximo primer ministro del país, en sustitución del liberal Alexander De Croo, quien dimitió tras su derrota en las elecciones del 9 de junio (que coincidieron con los comicios europeos) pero sigue en el cargo desde entonces en funciones.
Los negociadores aún tendrán que buscar este fin de semana la aprobación oficial de las bases de sus respectivos partidos para consolidar el acuerdo, que llegó finalmente en la noche de este viernes tras superar múltiples intentos previos frustrados y obstáculos en el camino.
Una vez aprobado el acuerdo por las cinco partes, se deberían revelar los nombres de los futuros ministros, que la Constitución belga marca en un máximo de quince.
La coalición, apodada «Arizona» por lo colores de la bandera del estado estadounidense, está formada por la derechista Nueva Alianza Flamenca (N-VA) de De Wever, el centroderechista Movimiento Reformista (MR) francófono, el centrista francófono Les Engagés, el centrista Partido Demócrata Cristiano y Flamenco (CD&V) y el partido de centroizquierda flamenco Vooruit.
Por lo que este nuevo gobierno liderado por De Wever estará compuesto por un eje de derecha (MR y N-VA), dos partidos centristas, (Les Engagés y CD&V), y los socialistas flamencos de Vooruit. Una combinación complicada de equilibrar políticamente, según destacan comentaristas políticos locales.
«Después de siete largos meses, finalmente tenemos un gobierno para el país», dijo el presidente de Voorruit, Conner Rousseau. «El mundo está en llamas. Y cuando arde, alguien tiene que apagarlo», afirmó en sus redes sociales.
«No somos el partido de los sueños ni el partido de las huelgas. Durante siete meses, Bélgica esperó un gobierno. No cedimos a las presiones. No firmamos por firmar (…) Estamos listos», dijo por su parte el presidente del MR, Georges-Louis Bouchez.
Bélgica cuenta con «un acuerdo de gobierno valiente y responsable que piensa en las generaciones futuras», añadió el presidente de Les Engagés, Maxime Prevot, quien aseguró que el acuerdo garantiza, entre otras cosas, que las pensiones seguirán pagándose en el futuro y que la asistencia sanitaria será de calidad y accesible.
Las conversaciones para la formación de gobierno se centraron en gran medida en la reducción del déficit presupuestario de Bélgica.
Según la cadena RTBF, el acuerdo tiene casi 800 páginas y la reforma central es la del mercado de trabajo.
La política migratoria se endurecerá, según el mismo medio, tanto en las condiciones para la reunificación familiar como en los requisitos y las tasas para obtener la nacionalidad belga. Además, los futuros recién llegados tendrían que esperar cinco años antes de tener derecho a asistencia social.
Además, el pacto contiene un aumento del presupuesto de defensa, que alcanzará el 2 % del PIB en 2029 y llegará al 2,5 % en 2034, y el ministerio de Interior pasará a llamarse de Seguridad, entres otras novedades.
Tras encerrarse en «conclave» tras el pasado miércoles, los negociadores finalmente llegaron a un acuerdo tras unas maratonianas conversaciones celebradas en el edificio de la Real Academia Militar, situado muy cerca de las sedes de las instituciones de la Unión Europea en Bruselas.
Una de las tareas pendientes y prioritarias del nuevo gobierno será la presentación de su plan presupuestario a la Comisión Europea, pendiente desde septiembre pasado. EFE
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