Perú rompe sus propios registros de muertes y contagios diarios por covid-19
Lima, 17 feb (EFE).- La segunda ola de la covid-19 en Perú ya superó en mortandad y expansión a la primera, después de que esta semana se registraran los picos más altos de toda la pandemia tanto en las cifras diarias de nuevos contagios como de fallecidos.
Bajo un confinamiento decretado desde inicios de febrero, con condiciones más laxas que la larga cuarentena del año pasado, la curva de contagios y de muertes continúa sin embargo en ascenso con una progresión mucho más acelerada y vertical que la primera ola.
Desde el pasado martes el nuevo récord de contagios diarios en Perú es de 11.443, registro que superó los 9.709 del 3 de septiembre de 2020, que hasta hace escasas semanas suponía el peor pico de la pandemia en Perú.
Lo mismo está ocurriendo con las cifras de fallecidos, pues el pasado sábado se contabilizaron 236 decesos por covid-19, lo que se sitúa por encima del peor día en defunciones vivido en la primera ola, que fue el 8 de agosto con 228 difuntos.
Esta tendencia de los números presentados en los reportes de la pandemia que ofrece diariamente el Ministerio de Salud también se ve refrendada por el Sistema Información Nacional de Defunciones (Sinadef), que refleja los fallecidos por toda causa en el país, lo que incluye también a los decesos sospechosos de covid-19.
EL TRIPLE CON MUERTES SOSPECHOSAS
En esa plataforma también se alcanzó un nuevo récord desde el inicio de la pandemia con 1.119 defunciones registradas el 12 de febrero, cuando el anterior pico máximo alcanzado en la primera ola era de 1.049 en julio de 2020.
Desde el 7 de febrero hay un promedio de mil fallecidos diarios a nivel nacional, cuando lo habitual antes de la pandemia eran alrededor de 300.
Existe por lo tanto un exceso de fallecidos cuyo pico máximo también fue el 12 de febrero con de más de 750, lo que constituye igualmente otra cifra superior al mayor valor alcanzado en este índice en la primera ola, que estuvo por debajo de los 750.
Lo mismo sucede con los fallecidos por millón de habitantes, pues el pasado viernes se registró un nuevo récord con 32,8 muertos, por encima de la marca más alta de la primera ola, que había sido de 29,8 muertos por millón de habitantes el 1 de junio.
MÁS DE 100.000 FALLECIDOS EN PANDEMIA
Así, desde el inicio de la pandemia hay registrado un excedente de más de 100.000 fallecidos, pero solo algo más de 44.000 están confirmados por covid-19.
Lo mismo sucede con los contagios acumulados, que suman casi 1,2 millones, pero los registros de los gobiernos regionales, que sí cuentan los casos sospechosos, elevan esta cifra al doble hasta superar los dos millones.
La fuerte incidencia de la segunda ola en Perú está además motivada por la circulación sin control en el país de las variantes británica y amazónica del coronavirus, con varios casos ya detectados de reinfección.
Los nuevos de muertes también están motivados por el nuevo colapso de la endeble sanidad pública, cuyos hospitales están otra vez desbordados, donde también hay un récord de hospitalizaciones, con más de 14.000 camas ocupadas.
SIN ESPACIO EN LAS UCI
De esos enfermos bajo observación médica hay más de 2.000 en unidades de cuidados intensivos (UCI) que requieran respiración artificial, un número muy superior a los 1.500 que se alcanzaron simultáneamente durante la primera ola.
A esta situación se suma la indignación de la población por el escándalo descubierto la pasada semana de las vacunaciones en secreto de altos funcionarios y sus familiares, incluido el expresidente Martín Vizcarra, con las dosis reservadas para el personal a cargo del ensayo clínico que se realiza en Perú el laboratorio chino Sinopharm.
De momento hay vacunados oficialmente en el país más de 80.000 profesionales de la salud en apenas una semana, además del presidente interino Fernando Sagasti, que se inoculó la vacuna de Sinopharm de manera pública en el primer día de la campaña de vacunación para incentivar la confianza de la población en el fármaco. EFE
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