«El objetivo es lograr un alto el fuego en Gaza»
Israel no intenta erradicar a la organización Hamás en la Franja de Gaza a pesar de la intensa campaña militar, según explica su embajador en Suiza.
Ilan Elgar dice que su país busca un cese de las hostilidades duradero con la principal fuerza política en el territorio de Palestina, que asegure una vida pacífica para los isrealíes que viven en la parte sur del territorio. Entrevista.
Este viernes, Israel rechazó la resolución de Naciones Unidas que pedía el alto al fuego en Gaza, mientras aviones y tanques volvían a golpear el enclave palestino.
Con centenares de civiles muertos, las acciones de Israel han sido denunciadas por el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), agencias de Naciones Unidas y gobiernos árabes y europeos.
swissinfo: La ONU está presionando para lograr un alto al fuego en la Franja de Gaza. ¿Está Israel preparado para aceptar un acuerdo de este tipo?
Ilan Elgar: Israel siempre ha buscado un alto al fuego, incluso antes de esta operación.
Ésta se produjo ya que Hamás anuló el 19 de diciembre el intento de este acuerdo para una tregua que ha durado seis meses. Pero un alto al fuego es como un tango: se necesitan dos partes. Y Hamás ha descartado cualquier tregua, por lo que no sé qué posibilidad existe para que cesen los combates en estos momentos.
swissinfo: Esta operación no va a acabar con Hamás. ¿Entonces, por qué esta demostración de fuerza?
I.L.: Erradicar a Hamás no es el fin de esta operación. Hamás está bien afianzado en la sociedad palestina y en Gaza. No nos estamos engañando a nosotros mismos creyendo que podemos eliminarlos.
La única cosa que estamos intentando es devolver una sensación de seguridad a la gente del sur de Israel y prevenir las condiciones que han conducido a esta situación imposible. Lo que buscamos es un alto el fuego duradero. No creo que realmente podamos apuntar a mucho más que eso.
Tenemos que hacer entender a Hamás las condiciones de un alto al fuego razonable con el que podamos abstenernos de causar daños en Gaza y hacer la vida soportable.
Esto significa que Hamás debe también abstenerse de alterar la vida normal en el sur de Israel. E incluye poner fin al contrabando de armas de largo alcance en Gaza.
Cuando el último alto al fuego se declaró al principio del año pasado, los cohetes de Hamás podían llegar 16 kilómetros al interior de Israel. Al final de la tregua, su alcance era de 40 kilómetros. Hamás usó ese tiempo para reponerse y rearmarse.
swissinfo: Dada la fuerza de las operaciones israelíes en la Franja de Gaza, ¿no supondrá esto una buena oportunidad para que ciertos elementos palestinos se vuelvan más radicales?
I.L.: Francamente, ellos ya se han radicalizado bastante. Es suficiente con escuchar a Hamás o mirar sus acciones para darse cuenta de que una parte de la población palestina se ha radicalizado más allá de lo imaginable. No se puede ir más allá.
Existe un grupo de gente que abiertamente habla de la erradicación de Israel. No se les puede hacer más radicales.
swissinfo: El CIRC criticó las operaciones israelíes. Dijo que no se está respetando el derecho humanitario, especialmente en el acceso a los civiles heridos, y alega que las fuerzas armadas hebreas impiden la entrada a la zona.
I.L.: No estamos haciendo esto de ninguna manera. No tenemos interés en herir a civiles o en impedir la asistencia médida. Hay casos en los que no se puede acceder a los heridos debido a los combates.
No necesito saber los detalles de los casos particulares para saber que la Cruz Roja o alguna otra organización no evitarían llegar a la gente que necesita ayuda, a menos que hubiera una razón aplastante como los actuales ataques.
swissinfo: Las autoridades de Israel han usado el término proporcional para describir las operaciones en la Franja de Gaza. La opinión occidental no parece muy de acuerdo con esa definición. ¿Cómo explicaría esta diferencia?
I.L.: No hay una definición clara de proporcionalidad. Es mucho más una cuestión del ojo desde el que se mira. No es algo que se pueda resolver con una respuesta en un libro de texto.
Proporcionalidad no significa que si Hamás ha lanzado 8.000 cohetes Kassam durante los pasados ocho años contra la población israelí, Israel construirá el mismo número de cohetes caseros y los disparará de vuelta hacia Gaza. Lo que pretendemos es finalizar esta situación insostenible.
Por otro lado tratamos de no dañar a la población civil. Aunque esto tiene sus limitaciones. Desgraciadamente, nunca he escuchado de ninguna guerra en la que civiles e inocentes no hayan resultado heridos. Las armas que sólo alcancen a los soldados no existen.
Pero se puede salir del lugar para evitar bajas civiles. Gaza es un área densamente poblada y Hamás está usando civiles como escudos humanos. Hay muchas evidencias de esto.
Las fuerzas israelíes han desarrollado métodos para evitar herir a los civiles. Cada una y todas de las bajas de palestinos son malas para nosotros políticamente, por lo que queremos evitarlas tanto como sea posible.
swissinfo: Una escuela dirigida por la ONU fue atacada y se registraron docenas de muertes hace sólo unos días. Los oficiales de Israel han dicho que habían algunos militantes de Hamás en los alrededores. ¿El fin justifica los medios?
I.L.: Aparentamente el Ejército encontró sus objetivos. Dos de las víctimas eran conocidos como militantes de Hamás. Además de eso, el derecho internacional nos permite atacar una instalación civil que sea usada para acciones militares. No se puede decir que porque sea una escuela gestionada por la ONU sea inmune. Un grupo de Hamás utilizó a la gente para ocultarse en el colegio, y esperaban que los israelíes no les dispararían.
swissinfo: Con este contexto, especialmete crítico desde los gobiernos extranjeros, ¿siente que ahora existe un mayor sentimiento antiisraelí?
I.L.: Obviamente, los combates y las víctimas civiles generan controversia y aumentan el nivel de críticas. Hemos encontrado las posturas y las críticas un tanto tendenciosas.
Debemos tener en cuenta que no vamos a ser tratados de forma imparcial. Aparentamente está bien que los israelíes sirvan como víctimas, pero no que respondan.
Entrevista swissinfo: Scott Capper
(Traducción: Iván Turmo)
En las páginas del diario dominical ‘SonntagsZeitung’ de este domingo, Ilan Elgar criticó a Suiza.
El embajador de Israel estima que la Confederación ha tomado partido contra el Estado hebreo, tras convocar el pasado viernes una reunión extraordinaria del Consejo de los Derechos Humanos en Ginebra, con motivo de la situación en Gaza.
Además «lamentó» la «manifestación anti-israelí» que se convocó en Berna para pedir el fin de la violencia en Gaza.
En la cita se dieron cita 7.000 personas el pasado sábado en las calles de la capital suiza.
Hamás, el principal movimiento islámico en los territorios palestinos, fue creado en los primeros días de la Intifada de 1987.
La organización se opone a los acuerdos de paz de Oslo y su objetivo en el corto plazo es el retiro israelí de los territorios ocupados.
Hamás no reconoce el derecho de Israel a existir.
Su objetivo a largo plazo es el establecimiento de un Estado islámico en la tierra originalmente conocida como Palestina, la mayoría de la cual está dentro de las fronteras de Israel desde su creación en 1948.
La organización está formada por un ala política y otra militar.
Tiene un número no determinado de miembros en un núcleo considerado ‘duro’ y decenas de miles de seguidores entre los palestinos.
Su ala política es la encargada de construir escuelas y hospitales en Cisjordania y en la Franja de Gaza, y brindar ayuda a la comunidad en asuntos sociales o religiosos.
Su ala militar, las brigadas Izzedine al-Qassam, es la encargada de los ataques contra Israel.
En cumplimiento de los estándares JTI
Mostrar más: SWI swissinfo.ch, certificado por la JTI
Puede encontrar todos nuestros debates aquí y participar en las discusiones.
Si quiere iniciar una conversación sobre un tema planteado en este artículo o quiere informar de errores factuales, envíenos un correo electrónico a spanish@swissinfo.ch.