El ex fiscal pide a Suiza sanciones más duras contra Rusia

Michael Lauber insiste en que se le está convirtiendo en chivo expiatorio de la política estatal suiza en materia de sanciones. © Keystone / Anthony Anex

El ex fiscal general de Suiza dice que se le ha convertido en chivo expiatorio por el enfoque blando de su país respecto a las sanciones contra Rusia.

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Michael Lauber está amenazado de sanciones en Estados Unidos por haber permitido supuestamente que los crímenes rusos quedaran impunes durante su etapa como máximo fiscal suizo.

Pero en una entrevista con el grupo de noticias Tamedia, Lauber insiste en que el verdadero problema es la falta de energía de Suiza a la hora de aplicar las sanciones rusas.

“Comparto la opinión de que Suiza es demasiado pasiva y vacilante a la hora de aplicarlas”, dijo. “El resentimiento contra Suiza se descarga ahora sobre mí. Como fiscal federal, me convirtieron en el chivo expiatorio de todo”.

Lauber ha pedido a Suiza que revoque su decisión de desairar a un grupo de trabajo internacional creado específicamente para coordinar las sanciones contra Rusia.

En Estados Unidos, la Comisión para la Seguridad y la Cooperación en Europa, también conocida como Comisión de Helsinki, acusa a Lauber y a otros dos suizos de haber ayudado a rusos sancionados en su día a hacerse con fondos congelados en Suiza.

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El organismo político, independiente del Gobierno estadounidense pero con cierta influencia en la política exterior, también acusa a Lauber y a otras personas de haber recibido regalos y viajes de funcionarios y oligarcas rusos.

Lauber se vio obligado a dimitir como fiscal general suizo en 2020 bajo el peso de las críticas a su historial, que van desde Rusia y Qatar hasta la FIFA.

Niega las acusaciones de la Comisión de Helsinki y ha solicitado una reunión con el embajador de Estados Unidos en Berna, Scott Miller, que también ha despreciado el historial de sanciones de Suiza.

Lauber dice que se ha visto obligado a cancelar trabajos en EE.UU. y Canadá como consecuencia de la mancha en su carácter. “La mera apariencia de que yo pudiera ser corrupto me hace indeseable”, dijo.

Suiza ha congelado 7.500 millones de francos suizos (8.600 millones de dólares) de activos bancables pertenecientes a oligarcas y empresas rusas sancionadas, además de una quincena de propiedades. El Estado alpino también ha congelado 7.400 millones de francos pertenecientes al banco central ruso.