Una constituyente paritaria en Chile
Senado chileno aprueba la primera ley en el mundo que revoluciona las formas de hacer de los partidos políticos bajo las reglas de la paridad. Análisis de la politóloga Yanina Welp.
A cuatro días del 8 de marzo, día internacional de la mujer, el Senado chileno discutió y aprobó la ley que establece la paridad de género en una eventual convención constituyente. Varias razones convierten esta decisión en un hito histórico, aunque su implementación todavía depende de que se apruebe el cambio constitucional en el plebiscito del 26 de abril de este año.
¿Por qué es un logro tan destacado? Primero, porque es novedosa, única en su género; segundo, porque en un momento de desencanto y declive, ofrece alternativas; y tercero, porque se ha conseguido a base de elaborar buenos argumentos, convencer a un sector importante de la sociedad de su relevancia y convencer también a una élite política hasta ahora muy reacia al cambio (al menos a una parte suficiente para triunfar en la votación). Veámoslo con mayor detalle.
Será la primera en el mundo que opere bajo las reglas de la paridad. Hay experiencias de convenciones constituyentes que se acercan un poco a la fórmula propuesta aquí, como la de Islandia en 2011 o las reformas constitucionales de Irlanda en 2012 y 2016, pero en estos casos o bien los partidos políticos no estaban en el centro o bien se reservaron una porción de representantes sin cumplir con las cuotas (Irlanda 2012). La propuesta chilena revoluciona las formas de hacer de los partidos políticos estableciendo la obligación de incluir mujeres en igual proporción. Y vale para todas las listas que compitan para ocupar puestos en el órgano constituyente, sean conformadas por un solo partido, de personas independientes o resultantes de pactos electorales. Todas las listas deberán estar encabezados por una mujer candidata y se ordenarán sucesivamente de forma alternada con las candidaturas de hombres. Los distritos que reparten un número par de escaños deberán derivar en la elección de igual número de varones y mujeres, mientras la fórmula en distritos impares se irá ajustando para que los resultados sean paritarios.
Ofrece una alternativa a la crisis de representación. Si en Chile esta crisis es flagrante en general, la subrepresentación de las mujeres sigue siendo una enorme deuda pendiente en particular. Un reciente estudio del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) titulado Nuevo Mapa del Poder y Género en ChileEnlace externo (1995-2018) muestra los avances en términos de igualdad en cuatro ámbitos: político (medido en mujeres en puestos de dirigencia política, que incluye desde parlamentarias y ministras hasta alcaldesas), económico (mujeres en directorios y gerencias), simbólico (medido en cargos en universidades y medios de comunicación) y social (medido en porcentaje de mujeres en organizaciones sociales, estudiantiles y sindicatos).
El informe sugiere que pese a que desde 1995 se ha duplicado la presencia de mujeres, esto no es del todo una buena noticia, ya que se ha pasado de una representación del 10% a una del 20, en general, mientras en ninguna de las cuatro áreas estudiadas se llega al 30%. En el ámbito político se ha pasado del 12 al 26%. Apenas un 12% de mujeres ocupan las alcaldías del país y la representación en el parlamento, con un 23%, es de las más bajas de América Latina.
Chile ha sido tardío, además, en la adopción de leyes de cuotas. Los datos son abiertamente descorazonadores en el ámbito económico y simbólico. Se ha pasado de un 3 a un 9% de mujeres en puestos directivos en empresas, y a modo de ejemplo, de los 24 rectores de universidades del país no hay ninguna (¡ninguna!) mujer. También, pese a que han aumentado su presencia en empresas de comunicación estratégica, en los medios de comunicación han descendido del 24% de 2009 hasta el 19 de 2018.
Finalmente, la constituyente paritaria es un logro tan destacado porque es histórica la lección dada por las mujeres que propusieron y defendieron la causa articulando una red de acciones que han buscado, sobre todo, persuadir de la importancia y necesidad de la medida. Los datos de la votación evidencian la enorme capacidad de intervenir en el debate, negociar y convencer, tanto a la opinión pública como a los encargados de la toma de decisiones políticas de apoyar la propuesta. La conformación paritaria del órgano encargado de redactar la constitución fue apoyada en el senado por 28 votos a favor, 6 en contra y 4 abstenciones.
Las impulsoras de esta propuesta, entre las que destacan las representantes de la Red de PolitólogasEnlace externo, una red de 470 especialistas con presencia en 25 países de Europa y América Latina y con un grupo sumamente activo en Chile, ha estado empujando desde los inicios. La ventana de oportunidad se abrió en octubre cuando la subida del precio del transporte dio inicio a una protesta de inesperadas dimensiones.
+ La ola de protestas en América Latina ¿Coincidencia o ‘zeitgeist’?
Aunque quizás fueron inesperadas solamente para el gobierno y unos cuantos representantes de partidos políticos, porque los datos –y muchas investigadoras e investigadores– venían señalando hace tiempo la caída en picada de la confianza en los partidos y las instituciones como el parlamento (por debajo del 10%) y el aumento del desencanto.
Desde 2011 las protestas y movilizaciones ciudadanas se suceden, sea por la reforma educativa, por el sistema de pensiones o por el acoso y la violencia sexual, entre otras. Con el caldo de cultivo en pleno hervor, en octubre pasado, a la suba del precio de transporte le siguieron las protestas y a las protestas una sucesión de decisiones desafortunadas del gobierno, entre las que se cuenta la declaración del estado de emergencia en buena parte del territorio y una muy baja capacidad para dar respuestas apropiadas.
Las graves denuncias de violación de derechos humanos por parte de las fuerzas de seguridad en esos días de protesta no hicieron más que echar más leña al fuego. El colectivo feminista Las tesisEnlace externo logró dar la vuelta al mundo con su canción “Un violador en tu camino” (le sonará a quien lea este artículo “el estado violador es un macho opresor” o “el violador eres tú”).
Yanina Welp es investigadora del Centro Albert Hirschman sobre la Democracia en Ginebra, que intenta entender de qué adolecen las democracias y la creciente desilusión de los ciudadanos con el poder democrático.
En cumplimiento de los estándares JTI
Mostrar más: SWI swissinfo.ch, certificado por la JTI
Puede encontrar todos nuestros debates aquí y participar en las discusiones.
Si quiere iniciar una conversación sobre un tema planteado en este artículo o quiere informar de errores factuales, envíenos un correo electrónico a spanish@swissinfo.ch.