La Cruz Roja suprimirá 1.800 puestos de trabajo en todo el mundo

La organización humanitaria con sede en Ginebra atraviesa una grave crisis financiera. © Keystone / Salvatore Di Nolfi

El Comité Internacional de la Cruz Roja, con sede en Ginebra, está llevando a cabo recortes de personal y oficinas humanitarias en todo el mundo mayores de lo previsto.

La organización humanitaria, que se enfrenta desde hace tiempo a un gran déficit de financiación, anuncióEnlace externo el martes que las medidas de recorte de gastos de este año se traducirían en la pérdida de 1.800 puestos de trabajo en la sede y las delegaciones de todo el mundo, y el cierre de al menos 26 de sus 350 centros en todo el mundo. El CICR había informado inicialmente de la supresión de 1.500 puestos de trabajo y el cierre de 20 centros.

Pero el impacto podría ser mayor. El número total de despidos no incluye al resto del personal que podría verse afectado debido a un menor número de asignaciones globales y a la congelación de la contratación para determinados puestos de trabajo. La radio pública suiza, RTS, dijo que esto podría afectar a unas 3.000 personas.

Se cerrarán las delegaciones de Mauritania, Kuala Lumpur y Grecia. Además, la presencia de la organización en Dakar, Nairobi, Ammán, Bangkok, Panamá y otras 21 localidades se «reducirá significativamente».

Otros emplazamientos del CICR también se «reducirán sustancialmente», cuando, por ejemplo, la zona pueda ser cubierta por otra oficina del CICR, o cuando otros socios humanitarios o de desarrollo puedan hacerse cargo de ella, dijo el CICR.

«Estos cambios reflejan una mayor concentración en las actividades básicas del CICR, como los programas en zonas de difícil acceso, de primera línea y en conflicto. También incluyen esfuerzos directamente relacionados con nuestro mandato de promover el derecho internacional humanitario y defender los derechos de las personas que viven en conflictos armados», dijo.

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La organización se enfrenta a una grave crisis financiera. Anteriormente había advertido de que se enfrentaba a un déficit en su presupuesto deseado de 2.790 millones de francos suizos (2.990 millones de dólares) para 2023. El 30 de marzo, la Junta de Gobierno del CICR aprobó recortes por valor de 430 millones de francos suizos para este año y principios del próximo.

La recaudación de fondos es especialmente difícil. El director del CICR, Robert Mardini, declaró a los medios de comunicación en marzo que había «menos donaciones para la ayuda humanitaria en general» y que el conflicto entre Rusia y Ucrania había hecho que las crisis en otras partes del mundo «cayeran en el olvido».

De las diez operaciones más importantes del CICR, que este año celebra su 160º aniversario, sólo Ucrania tiene perspectivas positivas de financiación, dijo Mardini a RTS. Todas las demás operaciones (Afganistán, Siria, Yemen, Sudán del Sur, Somalia, Irak, República Democrática del Congo, Etiopía, Nigeria) están infrafinanciadas, dijo.

El CICR emplea a unas 20.000 personas en todo el mundo.