Paz, crisis, Trump contra Biden: ¿qué le espera a la Ginebra internacional en 2024?

Los repetidos llamamientos de las agencias humanitarias desde Ginebra en favor de un alto el fuego en Gaza sólo han sido atendidos hasta ahora con una pausa humanitaria en el conflicto de seis días a finales de noviembre. Obs/handicap International

Las incertidumbres del futuro se ciernen sobre las organizaciones internacionales de Ginebra. El año 2024 podría traer esperanzas de paz, pero también nuevos conflictos o incluso el regreso de Donald Trump al poder. Análisis.

Un año más marcado por diversas crisis. Así podría resumirse el 2023 desde la perspectiva de las organizaciones de Ginebra. El año 2024 se presenta complicado.

Ucrania: la diplomacia se activa

El 14 de enero, la paz en Ucrania no se discutirá en Ginebra, sino en los Alpes suizos, en Davos, donde tendrá lugar una serie de discusiones sobre el plan de paz del presidente ucraniano Volodymyr Zelensky.

Rusia no participó en las tres etapas anteriores, en Yeda, Copenhague y Malta, y no hay indicios de que lo haga esta vez.

No se trata, por lo tanto, de negociaciones. Y la esperanza de que la paz se instale en Ucrania en 2024 sigue lejana. The Economist lo destaca en un editorial reciente: «Para Ucrania, es inaceptable permitir que Rusia retenga el territorio que ocupa, especialmente debido al impacto económico de la pérdida de parte de su acceso al mar. Para Rusia, la invasión sigue siendo un fracaso, ya que no controla completamente las cuatro provincias anexadas en 2022».

Uno de los pocos puntos en los que Ucrania y Rusia habían llegado a un acuerdo, el pacto sobre los cereales en el Mar Negro, negociado por la ONU y Turquía, expiró tras la retirada de Moscú en julio de 2023. Esto permitió la reanudación de las exportaciones ucranianas y una disminución del precio de los cereales, contribuyendo a prevenir una crisis alimentaria mundial. Consultada por Geneva Solutions, una alta funcionaria de la ONU revela que están en marcha conversaciones para revivirlo.

Una de las discretas ONG de mediación en Ginebra, el HD Centre, desempeñó un papel clave en la creación de este acuerdo, según reveló una investigación del medio Devex. Una diplomacia paralela que permite, en un momento en que una mediación del Gobierno suizo parece imposible, un diálogo indirecto entre rusos y ucranianos. En 2024, probablemente continuará su actividad, lejos de las miradas.

Oriente Medio: ¿Escalada o paz duradera?

A mediados de diciembre, el desenlace de la guerra en Oriente Medio sigue siendo incierto. Las llamadas de atención desde Ginebra de las agencias humanitarias para exigir un alto el fuego solo han tenido como respuesta una pausa humanitaria de una semana a finales de noviembre.

Durante esta pausa, el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) desempeñó un papel clave, facilitando, entre otras cosas, el traslado de 80 rehenes israelíes a cambio de 240 prisioneros palestinos.

Las personas humanitarias carecen actualmente de adjetivos para describir el sufrimiento de la población civil en Gaza. El próximo año, una pregunta los atormentará: ¿la guerra llevará a una escalada regional, a un conflicto arraigado en el tiempo o a una paz duradera?

Un sistema humanitario agotado

El año 2023 ha sido difícil para las agencias humanitarias de Ginebra. Los conflictos existentes no se han resuelto, mientras que nuevas crisis han surgido en Sudán y Oriente Medio. Además, se han sumado desastres naturales, a veces en áreas ya debilitadas: terremotos en Siria y Afganistán, así como inundaciones en Libia.

La ONU espera que las necesidades humanitarias alcancen los 46 mil millones de dólares en 2024, una estimación realista que tiene en cuenta las fuentes de financiamiento limitadas. A medida que se acerca el final del año, las agencias humanitarias de la ONU solo han recibido el 37% de los 57 mil millones de dólares que necesitaban.

La dificultad persistirá, mientras que las guerras en Oriente Medio y Ucrania dominan los medios occidentales, de atraer la atención de los países donantes hacia las crisis olvidadas, desde Haití hasta Afganistán, pasando por la República Democrática del Congo, Yemen y Siria.

El año 2023 también fue un año de crisis para el CICR, que se enfrentó a un importante déficit de financiamiento. Acusada de dispersarse demasiado y de deriva presupuestaria, la organización con sede en Ginebra indicó que se centrará en lo que hace única: las visitas a prisioneros de guerra, los intercambios de detenidos y la restauración de los lazos familiares.

El CICR ya ha reducido su presupuesto y anunció la eliminación de alrededor de 1800 puestos de trabajo. Con su neutralidad a menudo mal entendida, la organización deberá demostrar que aún puede marcar la diferencia. Un desafío importante para el futuro director general que asumirá sus funciones en abril.

Una elección presidencial de alto riesgo

En noviembre, los ojos de la Ginebra internacional se dirigirán hacia Estados Unidos, donde tendrán lugar las elecciones presidenciales. Un posible «rematch» en el que se enfrentarían nuevamente el presidente actual, Joe Biden, y su predecesor, Donald Trump. Una elección reñida que, como señala The Economist en otro editorial, deberá decidirse por los votos de unas «decenas de miles de electores en un puñado de estados».

Durante su mandato (2016-2020), el multimillonario estadounidense mostró claramente su desprecio por el multilateralismo, enfriando así las relaciones dentro de las organizaciones internacionales en Ginebra. Bajo su impulso, Estados Unidos se retiró de varias instancias, incluido el Consejo de Derechos Humanos y la Organización Mundial de la Salud. Como consecuencia, China ha ganado fuerza, decidida a aprovechar el vacío dejado por Washington para dejar su huella en el sistema de derechos humanos.

El regreso del proteccionismo económico del republicano sería ciertamente también una mala noticia para la Organización Mundial del Comercio (OMC), cuyo sistema de arbitraje ha estado paralizado desde la administración Trump.

Acuerdo sobre pandemias

En 2024, se espera que se adopte un tratado sobre pandemias en la Organización Mundial de la Salud (OMS). El futuro acuerdo, en proceso desde 2021, debería permitir a la OMS y a sus 194 Estados miembros prevenir de manera más efectiva y combatir mejor la próxima pandemia.

Las negociaciones avanzan, pero persisten diferencias entre los países del Sur y del Norte. Uno de los principales puntos de fricción es la protección de las patentes de vacunas y medicamentos. Los países con fuertes industrias farmacéuticas, incluida Suiza, consideran que flexibilizar estos derechos sería un obstáculo para la innovación.

Si el texto final se adopta según lo previsto en la próxima Asamblea Mundial de la Salud a finales de mayo de 2024, será un raro ejemplo actual de colaboración multilateral exitosa a nivel mundial.

Consejo de Seguridad: segunda vuelta para Suiza

Las decisiones políticas de la ONU se toman en Nueva York, pero tienen consecuencias en la actividad de su sede europea en Ginebra, desde donde se coordina, entre otras cosas, la acción humanitaria.

En 2024, para su segundo y último año como miembro no permanente del poderoso (aunque a menudo paralizado) Consejo de Seguridad, Suiza tendrá la oportunidad de llevar sus valores al más alto nivel.

Texto revisado y verificado por Virginie Mangin.

Adaptado del francés por José Kress