Suiza y Alemania adoptan plan sobre migración irregular

Los inmigrantes que llegan en tren desde Austria son controlados por funcionarios de aduanas suizos en Buchs, en el este de Suiza, el 16 de noviembre de 2022. © Keystone / Gian Ehrenzeller

La ministra de Justicia de Suiza, Karin Keller-Sutter, y la ministra del Interior de Alemania, Nancy Faeser, acordaron un plan de acción conjunto sobre inmigración irregular.

Vecinos, Suiza y Alemania quieren combatir las redes criminales de contrabando de seres humanos en ambos lados de la frontera y garantizar la implementación sistemática de devoluciones, informó el Ministerio de Justicia suizo en un comunicadoEnlace externo emitido el martes.

Las operaciones de transfronterizas serán intensificadas y se incrementará el uso de patrullas conjuntas para controlar el tráfico ferroviario, precisó.

“Es importante que cada país haga su parte, pero sin coordinación internacional y consulta entre vecinos no podemos combatir de manera efectiva la migración irregular”, subrayó Keller-Sutter después de la firma.

Faeser destacó la importancia de una estrecha cooperación con los vecinos e insistió en la necesidad de mantener abiertas las fronteras entre Suiza y Alemania. Agregó que el plan de acción conjunto permitirá controlar los movimientos migratorios evitando el uso de medidas engorrosas, como el restablecimiento temporal de los controles fronterizos.

El plan de acción promueve el registro de migrantes y la realización de deportaciones.

“El objetivo de Suiza y Alemania es evitar que las personas que no necesitan protección sobrecarguen el sistema de asilo”, aseguró el Ministerio suizo de Justicia.

La policía fronteriza de la Unión Europea, Frontex, indicó el mes pasado que se habían registrado 281 000 entradas irregulares en todo el bloque en los primeros 10 meses de 2022, un 77% más que el año anterior y la cifra más alta desde 2016.

Dado que la ruta de los Balcanes Occidentales es actualmente la más activa y que la UE da la bienvenida a varios millones de ucranianos que huyen de la guerra de Rusia, las preocupaciones sobre la inmigración han vuelto a la palestra. En los últimos meses, un número creciente de inmigrantes ha entrado en Suiza y Alemania a través de las rutas migratorias de los Balcanes occidentales y el Mediterráneo central.

La consecuencia para Suiza: casi 700 personas llegan cada semana a su frontera este, aproximadamente tres veces más que el invierno pasado, según se informó en octubre. Aunque las solicitudes de estatus de refugiado han aumentado, la mayoría de estos inmigrantes no tienen ningún deseo de quedarse en Suiza. Quieren continuar hacia Francia o Gran Bretaña.

Según una investigación de la televisión pública suiza RTSEnlace externo, difundida en octubre, Suiza estaba permitiendo el tránsito de migrantes a países vecinos en lugar de enviarlos de regreso al lugar de procedencia, como estipulan los Acuerdos de Dublín.