«Una democracia moderna debe tener reglas de transparencia»
El director de la ONG Transparencia Internacional en Suiza, Martin Hilti, celebra la adopción en Suiza de una normativa sobre la transparencia a la hora de financiar los partidos y las campañas políticas. Sin embargo, cree que hay deficiencias de control. Entrevista.
2023 es año de elecciones federales. La financiación de la vida política estará sujeta a normas de transparencia por primera vez a nivel nacional. Habrá que informar de las donaciones superiores a 15 000 francos, al igual que habrá que hacerlo con los presupuestos de campaña que superen los 50 000 francos. Durante mucho tiempo Suiza ha sido uno de los países europeos con peores resultados en este ámbito.
swissinfo.ch: ¿Por qué en una democracia como la suiza es importante saber quién financia los partidos, los candidatos y las campañas electorales?
Martin Hilti: Hay tres razones principales. En primer lugar, es una información muy importante para el pueblo, para las personas que tienen derecho a votar y elegir. El dinero tiene influencia en todos los ámbitos de nuestra vida y, en especial, en la política. Si no fuera así, ¿por qué se invertiría tanto dinero en financiar las campañas? La gente tiene que saber de dónde procede ese dinero. En segundo lugar, esta transparencia establece y garantiza la confianza de la ciudadanía en el mundo político. Por último, ayuda a descubrir posibles irregularidades y también a prevenir comportamientos problemáticos, que pueden conducir, incluso, a la corrupción.
¿Cambiarán estas normas la forma de organizar la actividad política?
Es difícil decirlo, solo podemos hacer suposiciones. Lo que sabemos de países que se pueden comparar a Suiza —pero también de cantones que han aplicado este tipo de normas— es que con más transparencia no disminuyen las donaciones. ¿Vamos a poder revelar posibles irregularidades? Tenemos que ver, quizá descubramos algún caso problemático. En general, la confianza de la gente en los cargos electos no es mala, pero no está garantizada. Hay que mantenerla constantemente y estas normas contribuyen a ello.
Como ha dicho, cantones como el Jura, Schwyz o el Tesino ya tienen normas similares. ¿Qué otras lecciones pueden extraerse de estos casos?
Una lección es que no hay que tener miedo a la regulación. Los cantones que tienen este tipo de normas han demostrado que es bastante factible.
Quienes se oponen creen que estas normas crearán una pesada carga administrativa para partidos, candidaturas y comités. Que tendrán que asegurarse de proporcionar información precisa y completa…
Mi opinión es totalmente distinta. En cualquier caso, cada partido o actor político que respete unos mínimos de gobernanza ya debería disponer de estas cifras. Hay que darse cuenta de que el reglamento es bastante modesto, por lo que este trabajo administrativo es limitado. Solo hay que comunicar las donaciones más importantes. Una democracia moderna debe tener normas de transparencia.
«Si alguien quiere eludir las normas, puede hacerlo»
Martin Hilti
Las donaciones de más de 15 000 francos deberán anunciarse. En su lugar cabe imaginar donaciones de 14 999 francos. ¿Cuáles son los riesgos?
Los riesgos son bastante elevados. Si alguien quiere eludir las normas, puede hacerlo. Por desgracia, el legislador realmente no ha intentado establecer una reglamentación que sea más difícil de eludir. Usted menciona una posibilidad de sortearlo: hacer varias donaciones y que ninguna de ellas alcance el umbral de 15 000 francos. Hay otras posibilidades. Es posible esconderse detrás de una estructura intermediaria, hacer una donación a una asociación o a una fundación que luego transfiera el dinero. Otra opción es utilizar testaferros: una persona da dinero a otra y es esta la que hace la donación.
El Control Federal de Finanzas suizo se encargará de recibir, comprobar y publicar la información. Esta no es su única tarea, ¿se verá desbordado?
No son sus otras tareas las que le impondrán límites, sino el hecho de que la ley solo le permite proceder a controles por muestreo y que dispone de recursos limitados.
«Si el Control Federal de Finanzas suizo descubre irregularidades, difícilmente podrá hacerlas públicas»
Martin Hilti
En caso de abuso, ¿se informará al público?
Si el Control Federal de Finanzas descubre irregularidades, difícilmente podrá hacerlas públicas. Si se observa un comportamiento problemático a nivel penal, el público conocerá los hechos solo después de que se haya recorrido todo el procedimiento, cuando se imponga una multa. Un poco tarde.
¿Cuál sería la alternativa?
Se podría haber introducido un reglamento que permitiera a la autoridad de control indicar que se está realizando comprobaciones, que faltan datos o que hay un procedimiento penal en curso.
Le preocupa esto…
Es un punto débil de la norma, porque no se garantiza que el público conozca los hechos reales. Lo que en principio se hace público solo es lo que los actores políticos comunican. Y si no lo comunican correctamente, entonces la información publicada es errónea.
¿Cuáles deberían ser los próximos pasos?
A nivel nacional, lo importante ahora es que todo el mundo aplique correctamente este reglamento. Es nuevo, hay que experimentar y luego ver si hay que adaptarlo. A nivel cantonal, es necesario legislar, porque la mayoría de los cantones aún no tienen ninguna normativa.
¿Cree que a este nivel dentro de diez años Suiza tendrá normas estrictas?
Espero que dentro de diez años hayamos dado un gran paso adelante. Soy bastante optimista, sobre todo teniendo en cuenta el interés de la opinión pública por este tema en los últimos años.
Artículo escrito en el marco del CFJM de Lausana (Centro de Formación en Periodismo y Medios de Comunicación)
Adaptado del francés por Lupe Calvo
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