Polonia alerta de situación «difícil» por migración en la frontera con Bielorrusia

Cracovia (Polonia), 26 sep (EFE).- El ministro polaco de Defensa, Władysław Kosiniak-Kamysz, afirmó este jueves que «ha aumentado la presión en la frontera polaco-bielorrusa», donde la situación es «grave» debido a los intentos de migrantes de ingresar al país de forma irregular, que en lo que va de año se han incrementado un 70 % con respecto a 2023.

En una rueda de prensa en la ciudad oriental polaca de Bialystok, el ministro citó estimaciones de la Guardia Fronteriza de Polonia, según las cuales últimamente se produce una media de 120 intentos diarios de cruzar de forma irregular la frontera de Bielorrusia a Polonia y afirmó que siguen produciéndose «ataques con palos y piedras» contra las patrullas polacas.

Según explicó Kosiniak-Kamysz, «hay 17.000 soldados destacados para la defensa de esa frontera, 5.300 de los cuales están desplegados permanentemente».

«La presión en esa zona ha ido aumentando en las últimas semanas y aún más en los últimos días», señaló el responsable de Defensa.

Afirmó que «desde principios de septiembre se han registrado aproximadamente 2.500 intentos de entrada ilegal, más que en julio y agosto juntos», y añadió que, en lo que va de año, se han contabilizado 26.000 intercepciones de migrantes, «un número similar a todo el año 2023».

Asimismo, el ministro polaco recordó que se ha detenido a «casi 500 personas» que actuaban supuestamente como «correos», transportando a personas en situación irregular desde Bielorrusia, y enfatizó que «se combatirá» sin piedad» una actividad que, según señaló, » es ilegal, viola la ley y constituye una amenaza a la seguridad del Estado polaco».

Desde el 13 de junio, las autoridades polacas impusieron una zona de no tránsito a lo largo de varios tramos de la frontera y no se permite a los civiles acceder a una franja de entre 200 metros y dos kilómetros de ancho en dos tramos de 60 y 40 kilómetros de sendos distritos fronterizos con Bielorrusia.

El 11 de septiembre se decidió prorrogar esta medida por 90 días más.

La primera vez que Polonia instauró limitaciones para acceder a la zona fronteriza fue en 2021, cuando alcanzó su momento álgido la crisis migratoria que Varsovia considera una «guerra híbrida» orquestada por Minsk.

Desde que comenzó la crisis migratoria, se calcula que ha habido cerca de 100.000 intentos de entradas irregulares en el país, una situación que se ha extendido a los países bálticos con 25.000 casos denunciados por Letonia y más de 22.000 por parte de Lituania. EFE

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