Se abren conversaciones de paz para Sudán, sin confirmación de presencia de beligerantes

Ginebra, 14 ago (EFE).- Las conversaciones de paz para Sudán se han iniciado entre delegaciones de Estados Unidos y de la región, pero sin confirmación de la presencia de alguna de las partes en guerra, según informaciones difundidas por el enviado estadounidense para este proceso, Tom Perriello.

El representante de Estados Unidos, que debe ejercer de mediador entre las partes, dijo a través de redes sociales que se había procedido a la apertura de una primera sesión con «socios internacionales y técnicos».

Los países participantes son Suiza (como anfitrión), Arabía Saudí, Egipto y Emiratos Arabes Unidos, además de delegaciones de la Unión Africana y de Naciones Unidas, con categoría de observadores.

¨»Nos centramos en asegurar que las partes cumplan con los compromisos asumidos en Yeda y en su implementación. Los beligerantes deben respectar el derecho humanitario internacional y permitir la ayuda humanitaria», indicó en una declaración.

Perriello no mencionó la presencia de ninguna de las partes del conflicto.

El más alto mando del Ejército sudanés había advertido que no enviaría una delegación a Ginebra y, en cambio, reiteró su voluntad de continuar luchando contra el grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR), con el que se había aliado para derrocar en 2021 al gobierno democráticamente elegido y que ahora considera como traidor.

Las FAR anunció que sí acudiría a las negociaciones, sin poner ninguna condición en particular.

El enviado de Estados Unidos dijo esta semana que guardaba la esperanza de que la cúpula militar de Sudán cambiara de opinión y apareciese en Ginebra, donde el plan es que las conversaciones duren diez días.

Reconoció que sin el ejército no podrá haber mediación, aunque insistió en que las conversaciones se mantendrán con el fin de buscar fórmulas para «silenciar las armas» y, sobre todo, para que las partes faciliten el acceso de la ayuda humanitaria en las áreas que controlan.

Todas las organizaciones humanitarias coinciden en que Sudán es actualmente la mayor catástrofe humanitaria del planeta por el volumen de personas afectadas y desplazadas por la violencia y el hambre, a las que se han sumado en las últimas semanas inundaciones generalizadas en el país.

La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) ha anticipado que decenas de miles de personas pueden morir en los próximos meses en Sudán si no hay una respuesta internacional «inmediata y masiva».

Las recientes inundaciones en ciudades, pueblos y aldeas han llevado a más de 700.000 sudaneses a tener que abandonar sus comunidades solo en las dos últimas semanas, con lo que el número total de desplazados internos ha llegado a los 10,7 millones de personas o el 20 % de la población de este inmenso país de África.

Además, otros 2,3 millones han cruzado la frontera a países vecinos.EFE

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