Universidades suizas “a reventar”
Las universidades en Suiza informaron sobre un alto número de estudiantes inscritos para el nuevo ciclo universitario y es probable que la tendencia continúe. ¿Existe el riesgo de que el país produzca demasiados académicos?
Algunas instituciones alcanzaron incluso niveles récord, como la Escuela Politécnica Federal de Zúrich (EPFZ) que a mediados de septiembre tenía más de 21 000 estudiantesEnlace externo, mil más que el año pasado. La Universidad de Lausana registró un incremento del 2%Enlace externo en relación con 2016-2017, lo que significó un total de 15 300 alumnos.
Los centros educativos amplían sus campus. La Universidad de San Gall, por ejemplo, contempla un enorme proyecto de construcción en el centro de la ciudad que costará 160 millones de francosEnlace externo y que debe ser aprobado primero por la ciudadanía local mediante votación.
El espacio ya es estrecho para 8 600 estudiantes. “Nuestro campus actualmente ofrece suficiente espacio para 5 000 estudiantes. Nos estamos arreglando con soluciones temporales, pero son caras y no de la mejor calidad”, señaló el rector, Thomas BiegerEnlace externo.
La Universidad de Berna convirtió una antigua sede de los Ferrocarriles Federales Suizos en una de sus instalaciones a un costo de 40 millones de francos, incluida una biblioteca. Otros proyectos están en trámite. “El desarrollo de espacios adicionales y la infraestructura para la investigación es uno de los mayores desafíos en este momento”, indicó el rector, Christian Leumann, en un comunicadoEnlace externo al inicio de las clases.
Formación universitaria
La popularidad de la educación terciaria explica la necesidad de expandirse, precisó Martin Fischer, de la Secretaría de Estado de Educación e Investigación (SERI), a la televisión pública suiza SRFEnlace externo, en septiembre.
En total, el 40% de la población elige ese nivel de formación y la tendencia está al alza con lo que podría llegar a casi el 60% en 2045Enlace externo.
Preocupaciones
¿Pero qué significa esto para el futuro? ¿El sistema dual, que combina la teoría con el trabajo práctico en una empresa y que ha ganado tanto renombre a Suiza está amenazado? ¿Habrá demasiados académicos?
No, dice Antonio LoprienoEnlace externo, experto en educación, exdirector del organismo que reúne a las universidades suizas y exrector de la Universidad de Basilea.
Observa positivamente la popularidad de la educación terciaria. La sociedad necesita jóvenes flexibles para progresar en profesiones especializadas que necesitan ciertas calificaciones, indicó a la SRFEnlace externo.
El actual presidente de la Federación Europea de Academias de Ciencias y Humanidades también señaló que si se compara el número de estudiantes de ese nivel con los de los vecinos, está claro que “la ‘academización’ en Suiza es mucho más lenta que en otros países”.
Suiza tiene un sistema vocacional y político que “afortunadamente protege al sistema de educación dual y lo defiende contra cualquier peligro. No creo que el aprendizaje clásico esté amenazado en absoluto”, subrayó.
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