Perspectivas suizas en 10 idiomas
Despenalización de las drogas: ¿hasta dónde va a llegar Suiza?

“Prohibir las drogas genera más problemas que los que resuelve”

weibliche, gepflegte Hände bereiten Kokain-Linien vor.l
Los consumidores de cocaína abarcan todas las edades y pertenecen a todas las clases sociales en Suiza. Keystone/Martin Ruetschi

Zúrich, junto con Londres y Amberes, está a la cabeza del consumo de cocaína en Europa. Se calcula que unas 2 000 personas toman este “veneno blanco” en la ciudad a orillas del Limmat. Expertos y políticos abogan por replantear la política sobre drogas, y apuestan por despenalizar el consumo, incluso de las drogas duras. Para la derecha más conservadora, esta medida sería descabellada.

Hace tiempo que el parque Platzspitz de Zúrich (tristemente conocido como el “parque de las jeringas”) ha dejado de ser el lugar de encuentro de miles de personas para inyectarse heroína a la vista de todos.

La cocaína es ahora la droga de Zúrich, que se ha convertido en la “meca de la cocaína” en Europa, tal y como se desprende de un estudio internacionalEnlace externo que ha analizado el contenido de cocaína y otros estupefacientes en las aguas residuales de unas 20 ciudades europeas. El objetivo de esta investigación es calcular el consumo de droga de la población.

Las autoridades de Zúrich no están orgullosas, en absoluto, del puesto que la ciudad ocupa en este apartado. Pero en vez de recurrir a la represión, la responsable municipal de Sanidad, Claudia Nielsen, pide que el problema de la droga se enfoque de otra manera. La meta, según ha declarado en un artículo del ‘Neue Zürcher Zeitung’ (NZZ), debe ser producir el menor número posible de daños. “Por eso hay que despenalizar el consumo y debilitar el mercado negro”.

Contenido externo
if(«undefined»==typeof window.datawrapper)window.datawrapper={};window.datawrapper[«EqXLL»]={},window.datawrapper[«EqXLL»].embedDeltas={«100″:699,»200″:582,»300″:543,»400″:526,»500″:504,»600″:504,»700″:487,»800″:487,»900″:487,»1000»:487},window.datawrapper[«EqXLL»].iframe=document.getElementById(«datawrapper-chart-EqXLL»),window.datawrapper[«EqXLL»].iframe.style.height=window.datawrapper[«EqXLL»].embedDeltas[Math.min(1e3,Math.max(100*Math.floor(window.datawrapper[«EqXLL»].iframe.offsetWidth/100),100))]+»px»,window.addEventListener(«message»,function(a){if(«undefined»!=typeof a.data[«datawrapper-height»])for(var b in a.data[«datawrapper-height»])if(«EqXLL»==b)window.datawrapper[«EqXLL»].iframe.style.height=a.data[«datawrapper-

“Represión, abstinencia, prevención”    

Los círculos más conservadores consideran que las reivindicaciones de esta concejala son escandalosas. La diputada nacional de la Unión Democrática del Centro (UDC, derecha conservadora) Verena Herzog está indignada. “Es horrible que incluso el NZZ apoye esta ofensiva de legalización. Es una estrategia totalmente contraproducente”, ha manifestado a swissinfo.ch. Esta madre de tres hijos adultos conoce personalmente el infierno de las drogas, según sus propias palabras, por las experiencias de jóvenes de su entorno que “han estado atrapados en este círculo vicioso: cannabis, alcohol, agresiones, policía, abandono de los estudios, clínicas”.     

Para Verena HerzogEnlace externo, peligra, incluso, la economía del país. “Suiza ha forjado su éxito en base a la precisión y fiabilidad. Si se legalizan las drogas, nuestra sociedad rendirá cada vez menos. Cuanto más fácil resulte conseguir las drogas, mayor será su consumo”, dice la presidenta de la asociación Jóvenes sin Drogas que, en la lucha contra las drogas, aboga por “más prevención, abstinencia y auténtica represión”. 

¿Ha fracasado la represión?                       

Michael HerzigEnlace externo conoce bien los argumentos de Jóvenes sin Drogas. Y es que este docente de la Universidad de Ciencias Aplicadas de Zúrich, durante años, fue responsable de la política de drogas en Zúrich. “¿Qué problemas se resuelven prohibiéndolos?”, se pregunta.

1 750 personas participan en el programa de suministro regulado de heroína, con una tendencia entre estable y a la baja. Unas 18 000 participan en programas de suministro de metadonaEnlace externo. 14 000 de ellas en consultas privadas. (Fuente: OFSP)                                                       

«Es evidente que la cocaína no es inofensiva. Pero es inútil proclamar a los cuatro vientos que es una sustancia peligrosa. No veo ningún éxito en esta política antidroga restrictiva. Prohibir las drogas en el mundo no ha contribuido a que se consuman menos. Lo que sí veo son sus efectos colaterales”, señala Herzig, refiriéndose a la delincuencia organizada, que se enriquece a costa de los toxicómanos. La historia nos ha demostrado que “prohibir las drogas genera más problemas que los que resuelve”.

Hace más de 20 años que Suiza llegó a esa misma conclusión con la heroína, tras comprobar que la política represiva empujó a la ilegalidad, la miseria y la muerte a miles de consumidores, la mayoría jóvenes. 

 Datos de la OFSP

“Un descenso significativo de la cifra de fallecidos por drogas, de infectados con el virus VIH y de la delincuencia vinculada a la drogodependencia. Una mejoría del estado de salud de los toxicómanos. Y una mayor seguridad en los lugares públicos. Son pruebas que muestran el éxito de la política de los cuatro pilares relativa a la droga y especialmente de la reducción de los daños”, dice el portavoz de la Oficina Federal de Salud Pública, Adrien Kay, en respuesta a la crítica de Herzog.

“Nadie dijo que esto solucionaría todos los problemas, pero Suiza ha encontrado cómo afrontar el problema de la droga de manera digna y socialmente aceptable, con lo que, además, está ganando el reconocimiento internacional”.

“La edad media (cada vez más avanzada de los heroinómanos en tratamiento) demuestra que el consumo de heroína, pese a la falta del efecto disuasorio de la miseria visible de la droga, tiene mala prensa entre los jóvenes”.

“Es posible que los beneficios económicos de los participantes en los programas de suministro de heroína no sean muy elevados pero, desde el punto de vista de la salud, es mucho más importante el hecho de que, gracias al trabajo, estas personas tienen una vida estructurada que hace que sean mucho menos propensos a caer en la delincuencia”.

Desde entonces, la política helvética en torno a la heroína se basa en el modelo de los 4 pilaresEnlace externo: Prevención, terapia, represión y reducción de los daños. El cuarto pilar incluye la posibilidad de que las personas con mayor adicción participen en un programa en el que la heroína se les suministra de manera regulada. Este modelo, que fue implantado por la entonces ministra de Sanidad, Ruth Dreifuss, ha sido secundado por otros países. Dreifuss considera que esa es la política correcta, y aboga por la despenalización de todas las drogas duras.    

No obstante, la diputada de la UDC, Verena Herzog, censura el modo en que Suiza afronta el problema de la heroína. “Es cierto que ya no muere tanta gente, pero lo que se ha hecho es desplazar la miseria a un segundo plano”, dice. “Con ello se pierde el efecto disuasorio”. Tampoco le convence el argumento de que, gracias al suministro regulado de heroína, la gente no necesita delinquir para comprar droga y puede trabajar. “Esta gente realiza actividades que afortunadamente les ayudan a recuperar su autoestima, pero aportan muy poco a la economía. Los problemas solo se resolverán si logran superar su adicción”.   

Esta política conservadora critica de manera feroz que se reivindique que “el Estado se convierta en traficante”, también de otras drogas duras. “La prevención así pierde toda credibilidad”.       

“Acceso legal para ciertos grupos”

Más que de legalizar, el experto en drogas Herzig prefiere hablar de regular. Y no solo el consumo. También el comercio y la producción. Considera que es absurdo despenalizar el consumo de drogas sin regular su comercio. “Y quien regule tiene que asegurarse de que la delincuencia organizada deja de actuar en este campo. Cualquier otra cosa sería como tratar solo los síntomas”. Herzig no pretende que las drogas se sometan a las leyes del mercado libre, sino que ciertos consumidores puedan acceder a ellas en condiciones muy estrictas. Diferentes según las distintas sustancias. “Lo difícil, pero deseable, sería garantizar que ciertos grupos puedan acceder de manera legal a las mismas, sin penalizar su consumo; y prohibirlas a otros grupos: niños y jóvenes, por ejemplo. Con el modelo de la protección de los jóvenes contra el consumo de alcohol y tabaco queda patente que esto no es tan sencillo”.

Muertes por consumo de heroína en Suiza yEE.UU.

No se puede hacer una comparación directa, porque es imposible calcular el número exacto de personas que consumen heroína. No obstante, es un hecho que en EE.UU., según la administración, cada año mueren entre 20 y 35 personas por cada 100 000 habitantes. En Suiza “solo” 1,7.  

(Fuente: OFSP)

Mostrar más
Cannabis leaves

Mostrar más

01 Cannabis Pageflow

Este contenido fue publicado en El reportaje de swissinfo.ch explora el potencial y los límites de una de las plantas más controvertidas de la historia.

leer más 01 Cannabis Pageflow Enlace externo

Traducción del alemán: Raquel Ruíz

Los preferidos del público

Los más discutidos

En cumplimiento de los estándares JTI

Mostrar más: SWI swissinfo.ch, certificado por la JTI

Puede encontrar todos nuestros debates aquí y participar en las discusiones.

Si quiere iniciar una conversación sobre un tema planteado en este artículo o quiere informar de errores factuales, envíenos un correo electrónico a spanish@swissinfo.ch.

SWI swissinfo.ch - unidad empresarial de la sociedad suiza de radio y televisión SRG SSR

SWI swissinfo.ch - unidad empresarial de la sociedad suiza de radio y televisión SRG SSR