Suicidio asistido: viajes organizados desde Rusia

Los cuidados paliativos pueden ser una alternativa al suicidio asistido. Keystone

Según un diario ruso, la agencia ‘Megapolis Kurort’ ha creado una oferta específica para los clientes rusos que deseen viajar a tierras helvéticas para poner fin a su vida. Suiza es uno de los pocos países europeos donde la asistencia al suicidio es legal.

Hasta ahora los rusos podían emprender este tipo de viajes a título privado, según explica el propietario de la agencia de viajes, Anatoli Aronov, al diario ‘IzvestiaEnlace externo’. Pero estos viajes individuales conllevan ciertos riesgos y muchos trámites burocráticos.

En el futuro, los procedimientos para el suicidio asistido en Suiza serán más fáciles. Anatoli Aronov afirma que su agencia de viajes Megapolis KurortEnlace externo se encargará de organizar los viajes. Y para ello ha presentado una solicitud a las autoridades rusas competentes para que este tipo de servicios sean reconocidos y autorizados.

Morir con vistas al lago Lemán

“Nos planteamos alquilar una casa a orillas del lago Lemán. Luego, queremos crear un ambiente totalmente individual para los candidatos al suicidio. Su bienestar es primordial para nosotros. Queremos brindarles la posibilidad de que puedan pasar las últimas horas de su vida de forma digna, contemplando el fantástico paisaje del lago Lemán”, explica Anatoli Aronow al diario.

La agencia de viajes prevé asociarse con una organización suiza especializada en la asistencia al suicidio. Cada paciente tendrá la obligación se sostener dos entrevistas de carácter confidencial con un médico y con un psicólogo. Los viajes a Suiza costarán alrededor de 5 000 francos.

Aronow puntualiza que los pacientes tendrán que manifestar de forma inequívoca su voluntad de poner fin a su vida y su declaración se grabará en videocámara. Aunque la asistencia al suicidio está prohibida en Rusia, la ley permite viajar al extranjero con ese propósito.

Aumentan los casos de suicidio asistido

“La idea en sí no es nueva. Los europeos que han decidido libremente terminar con su vida viajan desde hace bastante tiempo a Bélgica o Suiza, países donde la asistencia al suicidio es legal. Es posible que un número importante de rusos también hayan recurrido a esta opción”.

En los últimos años ha aumentado el denominado ‘turismo de la muerte’ en Suiza. Según la Oficina Federal de Estadística, en el año 2014 se registraron 724 casos, un 2,5 veces más que cinco años antes. En 2014, los suicidios asistidos representaron alrededor del 1,2% de los decesos en Suiza.

En Suiza, la regulación de la asistencia al suicidio es competencia de los cantones. Desde hace varios años aumentan las clínicas y las residencias de ancianos que ofrecen un acompañamiento al suicidio. En 2014, la organización Exit asistió a 583 personas que habían decidido poner fin a su vida. En la ciudad de Basilea, las residencias de personas mayores tienen derecho a decidir si quieren incluir la asistencia al suicidio en su oferta de servicios.​​​​​​​

Traducción del alemán: Belén Couceiro