Softbank Group salva a la compañía de trabajo compartido WeWork
Considerada hasta hace poco como un ejemplo de economía colaborativa, la empresa de trabajo compartido o coworking WeWork tuvo que aceptar ser salvada por su accionista japonés SoftBank Group.
SoftBank Group anunció el miércoles una inyección adicional de 5.000 millones de dólares en WeWork y una oferta pública de adquisición (OPA) sobre las participaciones que aún no posee, por un máximo de 3.000 millones.
El pago de SoftBank Group a WeWork de un vencimiento de bonos de 1.500 millones de dólares también se adelantará, informó la compañía.
SoftBank, que actualmente posee el 29% del capital de WeWork, subirá al 80%, pero «no controlará la mayoría de los derechos de voto en las reuniones del consejo de administración». No especifica cómo se repartirán estos derechos ni el motivo por el que renuncia a ellos.
«WeWork será un socio de SoftBank», indica en un comunicado.
El plan de SoftBank, propiedad del multimillonario japonés Masayoshi Son, implica la partida definitiva del expresidente director ejecutivo Adam Neumann, cuya gestión se convirtió en un obstáculo para encontrar a posibles inversores.
«SoftBank está firmemente convencido de que el mundo del trabajo está cambiando radicalmente. WeWork está a la vanguardia de esta revolución. No es raro que los principales pioneros tecnológicos del mundo se vean confrontados a problemas de crecimiento similares a los que acaba de enfrentarse WeWork», dijo Masayoshi Son, fundador y presidente de SoftBank Group, citado en el comunicado.
El rescate de WeWork ilustra las dificultades de una empresa que ha visto las cosas a lo grande, arropada por inversores dispuestos a apostar por la nueva economía.
Pero, al igual que sucedió con Uber y Lyft, en los últimos meses han surgido interrogantes sobre la capacidad de WeWork de ser rentable y de hacer frente a la desaceleración económica mundial.