Al Burhan, el general afable que lidera Sudán tras el golpe de Estado

Jartum, 26 oct (EFE).- El jefe de las Fuerzas Armadas de Sudán, el general Abdelfatah al Burhan, vuelve a estar oficialmente al frente del país tras el golpe de Estado perpetrado ayer, lunes, por los militares, después de haber liderado la primera etapa transitoria que siguió al derrocamiento del dictador Omar al Bashir, en abril de 2019.

En aquel entonces encabezó la junta militar que asumió las riendas del país después de que el Ejército apartara del poder a Al Bashir, tras meses de protestas populares en todo Sudán.

Al Burhan, nacido en 1960 en el norte de Sudán, sustituyó a Awan bin Auf, que dimitió tan sólo veinticuatro horas después de haber sido designado como jefe de la junta debido al rechazo de la calle y de las fuerzas políticas opositoras que forzaron el derrocamiento de Al Bashir.

En aquel momento, Al Burham fue aceptado por la oposición y los manifestantes, que lo consideraban menos cercano al exdictador, pero posteriormente fue muy criticado, sobre todo por la represión violenta de las protestas en los meses siguientes, incluido el desmantelamiento de la acampada junto al cuartel general de las Fuerzas Armadas, acción en la que murieron al menos 120 personas en junio de 2019.

Finalmente, en agosto los generales aceptaron compartir el poder con los civiles, ambos firmaron un documento constitucional a modo de hoja de ruta para la transición y, a continuación, fue nombrado un Gobierno civil encabezado por el primer ministro Abdalá Hamdok, arrestado ayer y custodiado en la residencia de Al Burhan.

Desde agosto de 2019 hasta ahora, el general ha presidido el Consejo Soberano, máximo órgano ejecutivo de la transición que estaba integrado por civiles y uniformados, y que fue disuelto ayer por el propio Al Burhan, que a día de hoy sólo mantiene el cargo de jefe de las Fuerzas Armadas.

En todo este tiempo, ha sido la cara más afable de los generales, frente a Mohamed Hamdan Dagalo, conocido como “Hemedti”, líder de las Fuerzas de Apoyo Rápido, que han sido acusadas de violaciones de los derechos humanos durante y después de la revolución sudanesa.

Al Burham inició su carrera en el Ejército tras graduarse en la Academia Militar de Sudán y recibió formación en Jordania y Egipto antes de desarrollar su lado más diplomático cuando ocupó el puesto de agregado militar en la embajada sudanesa en Pekín.

Además, desempeñó labores destacadas como comandante de la Guardia Fronteriza y fue uno de los líderes de las fuerzas gubernamentales durante la guerra de Darfur (2003-2008), donde las tropas sudanesas y milicias afiliadas a ellas cometieron presuntos crímenes de lesa humanidad y genocidio, según la Corte Penal Internacional de La Haya.

En 2015 se le nombró comandante del Ejército de Tierra y supervisó las fuerzas sudanesas que intervienen en el Yemen en el marco de la coalición capitaneada por Arabia Saudí, conflicto por el que también Jartum ha recibido críticas.

En febrero 2019 Al Bashir le designó inspector general del Ejército y se le promovió al empleo de general. EFE

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