¿Cómo va la economía suiza?: balance del primer trimestre

Como sucedió en Villars-sur-Ollon, ubicada en el cantón de Vaud, el resto de las pistas de esquí también estuvieron muy concurridas en Suiza este invierno. KEYSTONE/© KEYSTONE/ VALENTIN FLAURAUD

Una inflación a punto de ser controlada, un invierno soleado para el turismo suizo, y empresas industriales que observan una clara desaceleración económica son los principales rasgos de la economía suiza durante el primer trimestre. Nuestro resumen sector por sector.

1) Inflación a la baja, pero el crecimiento no llega

Los expertos de la Secretaría de Estado de Economía (SECO) mantienen el pronóstico de un frágil crecimiento suizo en 2024. Anticipan que el producto interior bruto (PIB) crecerá solo 1,1%. A mediados de marzo, la SECO había advertido ya en un comunicado que “la economía mundial presentaba un panorama muy heterogéneo hasta hacía muy poco”.

El crecimiento es sólido en Estados Unidos y China, pero la eurozona observa un estancamiento, e incluso un retroceso en el caso de Alemania, que es el principal cliente de las exportaciones suizas. Por lo tanto, es probable que el crecimiento se mantenga moderado en la eurozona en los meses por venir, lo que frenaría las exportaciones helvéticas.

En este contexto, el Banco Nacional Suizo (BNS) sorprendió al mundo este primer trimestre bajando su tipo de interés oficial de 1,75% a 1,5% el 21 de marzo. La inflación suiza no ha dejado de reducirse durante los últimos meses, al pasar del 1,7% en diciembre al 1% en marzo. Es un dato muy inferior al 2,4% reportado en marzo en la zona euro o al 3,2% que anunció Estados Unidos en febrero.

Así, una mejor evolución de los precios de consumo suizo permitió al BNS actuar con rapidez bajando las tasas de interés, aunque los expertos no esperaban una reducción antes de junio. El banco central se manifestó optimista con respecto a la futura evolución de los precios: anticipó una inflación del 1,4% este año, por debajo del límite máximo del 2% que tiene como meta la autoridad monetaria.

2) Los relojeros suizos: regreso a la normalidad

Tras más de dos años de crecimiento sin pausa, las exportaciones relojeras suizas registraron en febrero su primer caída significativa (-3,8% interanual). «Hemos entrado en una fase de normalización», aseguró Jean-Philippe Bertschy, experto en relojería del banco Vontobel.

La caída de las exportaciones en febrero fue especialmente aguda en China (-25,4%) y Hong Kong (-19%). Pero a juicio de Jean-Philippe Bertschy, estos datos deben relativizarse porque el mes de febrero del 2023, que se toma como base de comparación, fue el mes en el que estallaron las ventas de relojes porque China eliminó las restricciones sanitarias impuestas por Pekín previamente. Por ello, el banco suizo Vontobel decidió mantener su expectativa de crecimiento de las exportaciones relojeras suizas en un rango de entre 2% y 4% en 2024.

Este ajuste de ritmo hacia uno más habitual también se observa en el mercado de segunda mano: los precios de los relojes de acero más demandados -que algunas veces podían venderse en línea a un valor entre cuatro y cinco veces superior al que tenían en las tiendas- también han experimentado un importante retroceso. “El auge posterior a la pandemia de COVID estuvo ligado parcialmente al explosivo crecimiento de las criptodivisas y a los obligados ahorros que acumularon los consumidores durante la crisis sanitaria. Pero la recuperación ha anulado totalmente la demanda de los especuladores”, precisa Jean-Philippe Bertschy.

3) La industria de la maquinaria, en un bache

Resultado de las dificultades económicas que experimentan algunos de los principales socios comerciales de Suiza, con Alemania y China a la cabeza, la industria nacional de la maquinaria, equipos eléctricos y metales (conocida como MEM) atraviesa un periodo complejo. En 2023, las principales empresas de este sector, que es empleador de un total de 325.000 personas en Suiza, reportaron una caída marginal de sus ventas (-0,8%), pero un acentuado retroceso en los nuevos pedidos (-8,4%).

Swissmem, organización paraguas de este sector, confía en que esta situación tocará fondo a mediados de año. El segundo semestre permitiría pues una mejora paulatina de la situación actual. Dado que las industrias MEM exportan el 80% de lo que producen, dependen significativamente de la evolución de la economía mundial y de las barreras vinculadas al acceso a los mercados globales.

Por ello, el tratado de libre comercio que Suiza firmó en marzo con India -un mercado de 1.400 millones de habitantes- fue acogido muy positivamente por este sector. Se prevé una reducción importante y, en algunos casos, incluso la supresión progresiva de los aranceles que aplican a la importación de bienes industriales -actualmente ubicados entre el 8% y el 22%-, lo que sería un catalizador para la competitividad de la industria helvética “especialmente frente a las empresas de China, Reino Unido, la Unión Europea o Estados Unidos que compiten con nosotros, porque aún no han concluido un acuerdo de este tipo”, expresó Swissmem en un comunicado de prensa.

4) Un soleado invierno para el turismo suizo

A principios de abril, Suiza Turismo presentó un «excelente balance» de la temporada suiza de esquí. De hecho, este invierno fue incluso ligeramente mejor que la temporada 2022/2023, que ya había sido satisfactoria, según la organización paraguas del sector turístico, que en breve difundirá las cifras definitivas de las pernoctaciones hoteleras.

Las estaciones de esquí registraron un aumento del 5% en su número de visitantes a finales de marzo del 2024 con respecto al mismo mes del año pasado. La tendencia fue especialmente positiva en el Tesino (+43%). «En esta temporada el cantón transalpino fue beneficiado por abundantes nevadas, incluso a baja altitud», expresó Berno Stoffel, director de Remontes Mecánicos Suizos en un comunicado.

Otro motivo de celebración para el sector turístico suizo es que, aunque muchos turistas nacionales fueron el impulso de la temporada invernal, también creció el número de huéspedes de la Unión Europea y Estados Unidos que visitaron las montañas suizas. «Tras la recuperación del invierno pasado, hemos vuelto a observar una afluencia masiva de turistas norteamericanos, especialmente gente joven”, refirió Marc Ungerer, director de la Región Turística de Jungfrau, en un comunicado de Suiza Turismo.

5) La industria farmacéutica transformada y revitalizada

La profunda reestructuración experimentada por el gigante farmacéutico suizo Novartis ha comenzado a rendir frutos. Novartis y su antigua división de genéricos Sandoz observaron cómo sus ventas se vieron catapultadas, resultados que formalizaron en sus primeros balances anuales ya como empresas separadas.

Novartis anunció un crecimiento del 10% de su facturación en 2023 con un tipo de cambio constante, lo que equivale a 45.000 millones de dólares, y beneficios de 8.600 millones. Por su parte, las ventas de Sandoz aumentaron 7% el año pasado, totalizando 9.600 millones de dólares. Exclusivamente durante el cuarto trimestre la facturación creció 10%.

Estos generosos resultados beneficiaron también al director general de Novartis, Vas Narasimhan, quien ganó 16,2 millones de francos suizos (18,8 millones de dólares), viendo así duplicada su remuneración en 2023, lo que le convirtió en uno de los directores generales mejor pagados de la industria farmacéutica global.

A su homólogo de Roche, Thomas Schinecker, la vida le sonrió menos. La fortaleza del franco, unida a una caída en las ventas de las pruebas para detectar COVID y una mayor competencia en los biosimilares, produjeron una caída en las ventas del 7%, que totalizaron 58.700 millones de francos suizos. Pero a un tipo de cambio constante, sin embargo, las ventas habrían aumentado un 1%. En tanto, el beneficio operativo básico, uno de los principales indicadores observados por los analistas, cayó un 13% en 2023.

El año pasado, Thomas Schinecker tomó la decisión estratégica de revisar a fondo la cartera de investigación de Roche, deshaciéndose de aquellos potenciales fármacos y proyectos que parecían menos prometedores. El objetivo, según expresó en marzo a los inversores era que el 80% de la cartera de la empresa fuera «la mejor en cada enfermedad o en su categoría”.

6) Los gigantes de la alimentación enfrentan grandes repuntes de precios

Nestlé registró ventas por 93.000 millones de francos suizos en 2023, que representa una caída del 1,5% debido a la fortaleza del franco y la evolución de los hábitos de consumo de sus clientes. El gigante de la alimentación y las bebidas subió sus precios para compensar el incremento del coste de sus insumos en los años previos, lo que ha conducido a algunos consumidores a optar por marcas más baratas. El director general de Nestlé, Mark Schneider, intentó tranquilizar a los consumidores al decir en febrero que «los precios serán mucho más bajos este año que el pasado».

Sin embargo, es difícil saber con qué rapidez se reducirán los precios, especialmente en caso del chocolate dadas las condiciones actuales del mercado. En marzo pasado, los precios del cacao superaron la barrera de los 10.000 dólares (9.058 francos suizos) por tonelada en el mercado de futuros, un dato que marca un máximo histórico. Y se espera que los precios se mantengan altos por las malas condiciones meteorológicas y las plagas que han afectado el rendimiento de las cosechas de los dos principales productores de cacao del mundo: Costa de Marfil y Ghana.

Por su parte,  la empresa agroalimentaria Syngenta, basada en Basilea y propiedad de inversores chinos, anunció un retroceso del 18% en sus ganancias antes de impuestos y del 4% en sus ventas, lo que se debió a que algunos mercados redujeron su consumo de productos fitosanitarios, explicó la firma.

Una de las principales prioridades de la empresa ahora es reducir su deuda neta, ya que asciende a más de 20.000 millones de dólares, que equivalen a cuatro veces su beneficio antes de impuestos. De hecho, Syngenta estaba analizando la posibilidad de cotizar acciones por varios miles de millones de dólares en la bolsa de Shanghái para reducir este pasivo. Pero en marzo abandonó este proyecto debido a que el mercado chino de renta variable estaba viviendo un mal momento.

Texto adaptado del francés por Andrea Ornelas / Carla Wolff

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