Un viceministro taiwanés de Defensa viajará a EE.UU. para ceremonia de entrega de F-16V
Taipéi, 26 mar (EFE).- Uno de los viceministros de Defensa de Taiwán viajará esta semana a Estados Unidos para asistir a la ceremonia de entrega de un nuevo caza de combate F-16V para la isla, en lo que supone la primera visita de este tipo desde el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca.
En una rueda de prensa recogida por la agencia de noticias CNA, el director del departamento de planificación de la Fuerza Aérea taiwanesa, Chiang Yuan-chi, aseguró este miércoles que el primero de los nuevos F-16V saldrá de la fábrica de Lockheed Martin en Carolina del Sur (sureste de EE. UU.) esta misma semana.
«El primer avión ha completado el ensamblaje del fuselaje», aseveró Chiang, que no especificó el día exacto en que tendrá lugar la ceremonia de entrega de la aeronave.
La delegación isleña estará encabezada por uno de los dos viceministros de Defensa de Taiwán, aseguró el director del departamento de planificación de las fuerzas armadas, Weng Yu-heng, quien tampoco aclaró el nombre del ministro ni del resto de integrantes de la comitiva.
En agosto de 2019, el Departamento de Estado de EE.UU. aprobó la venta de 66 cazas de combate F-16V Bloque 70 a Taiwán por una cuantía de 8.000 millones de dólares, en medio del recrudecimiento de las tensiones entre Taipéi y Pekín.
Sin embargo, los cuellos de botella de la industria estadounidense de defensa, motivados, en parte, por la invasión rusa de Ucrania, han retrasado los envíos de armas a Taiwán.
Según los últimos datos del Ministerio de Defensa Nacional (MDN), la isla cuenta actualmente con dieciocho proyectos de adquisición de armas en curso con Estados Unidos, de los cuales quince avanzan con normalidad, dos han sufrido retrasos y uno se ha adelantado.
Entre los proyectos que han sufrido demoras se encuentra, precisamente, el de los 66 cazas de combate F-16V, aeronaves que están programadas para llegar a Taiwán de manera sucesiva antes de finales de 2026.
Durante los últimos años, Taiwán ha fortalecido sus capacidades defensivas para contrarrestar las actividades militares de China, que considera a la isla, gobernada de forma autónoma desde 1949, como una «provincia rebelde».
Desde hace más de siete décadas, EE. UU. se encuentra en medio de las disputas entre ambas partes, ya que Washington es el principal suministrador de armas a Taipéi y, si bien no mantiene vínculos diplomáticos con la isla, podría defenderla en caso de conflicto con Pekín. EFE
jacb/aa/ah