La FIFA pide el mismo trato que la ONU y la Cruz Roja
La FIFA, órgano rector del fútbol mundial, confirmó que intenta mejorar su estatus en Suiza para asemejarlo al que gozan organismos como el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) o las Naciones Unidas.
La FIFA, con sede en la ciudad de Zúrich, es considerada actualmente como una asociación sin fines de lucro, lo que le concede exenciones fiscales y le da más libertad para decidir con respecto a los negocios que realiza comparada con las empresas tradicionales. Pero ahora quiere sumarse a la gran liga de los organismos internacionales que gozan de un estatus especial gracias a la legislación suiza vigente.
¿Qué ganaría la FIFA?
La Ley del Estado Anfitrión precisa con claridad las condiciones que exige cumplir el gobierno suizo Enlace externopara acogerse a ella y los beneficios potenciales que ofrece a cambio. Estos incluyen, «inmunidad en los procedimientos legales», «exención de los requisitos de ingreso y residencia en Suiza» y “mayores deducciones tributarias”. Pero ninguno de estos derechos es automático. Se conceden solo caso por caso, en función de la naturaleza de cada organización.
En una declaración enviada por la FIFA a la radio pública de Suiza RTS, Enlace externola máxima autoridad del futbol aclaró que su solicitud no busca mayores beneficios fiscales. Pero si intenta eliminar las restricciones que enfrenta actualmente la contratación de personal internacional.
Suiza concederá 8 500 visas de trabajo este año a empleados extracomunitarios, 1 000 más que en 2018. Pero muchas multinacionales argumentan que todavía no son suficientes para poder reclutar a los mejores talentos internacionales.
¿Por qué ahora?
El Comité Olímpico Nacional Enlace externoha formado parte de una lista de entidades privilegiadas Enlace externodesde el año 2000, al ser incluido en la categoría de “otros organismos internacionales”.
Michel Zen Ruffinen, quien se desempeñó como secretario General de la FIFA entre 1998 y 2002, expresó a la RTS que mejorar su estatus ha formado parte de la agenda de la FIFA “desde hace tiempo”, pero no presentó ninguna solicitud formal durante el tiempo que duró su mandato.
De acuerdo con informes de la prensa, la iniciativa podría tener como autor más bien al presidente actual de la FIFA, Gianni Infantino, quien abordó este tema con el ministro de Asuntos Exteriores, Ignazio Cassis, en 2017, algunas semanas después de asumir el cargo.
¿Hay algunas cáscaras de banana en el piso?
En realidad, ¡hay varios tropiezos potenciales! La FIFA ha atravesado varios años de tumultuosos escándalos de corrupción, investigaciones penales y condenas de figuras clave de este organismo. Hay investigaciones que aún están en curso, algunas de ellas en Suiza.
El Foro Económico Mundial (WEF en inglés) incursionó en el exclusivo club de las oenegés suizas en 2015, adquiriendo los derechos que concede la Ley del Estado Anfitrión por el “importante rol que ha tenido en Suiza Enlace externoal haber alcanzado una dimensión global y ganado un amplio reconocimiento entre los Estados y las organizaciones internacionales”. FIFA, en cambio, ha ganado reputación a nivel global por haber pagado coimas.
Tras su relección para un segundo mandato como presidente de la FIFA la semana pasada, Infantino insistió que este organismo ya está limpio. “La organización abandonó su estado tóxico, casi criminal, para convertirse en lo que debía ser. Ya no hay lugar para la corrupción en la FIFA. Y habrá “cero tolerancia” en este tema”, dijo Infantino.
Pero de eso a concederle a la FIFA el mismo trato que tiene hoy tiene la Organización Mundial de la Salud (OMS) hay un trecho y el tema podría convertirse en una papa caliente para Suiza.
¿Qué dice la gente?
El político socialdemócrata Cédric Wermuth cree que la FIFA está demasiado centrada en generar ingresos para ser considerada para tal estatus. “El deporte es un bien cultural. La FIFA representa la privatización del comercio de este bien cultural. Hoy, ya no podemos hablar de una organización sin fines de lucro, ni siquiera considerar el estatus de ONG para la FIFA”, dijo a RTS.
El político del Partido Popular, Roland Büchel, un crítico feroz de la FIFA en el pasado, adoptó un tono más conciliatorio. “Si solo quieren obtener un mejor acceso al personal que no pertenece a la UE, entonces eso tiene sentido para mí”, dijo a swissinfo.ch. “Pero de ninguna manera esto debería significar privilegios especiales como pasaportes diplomáticos o beneficios fiscales para las personas”.
Traducido del inglés por Andrea Ornelas
En cumplimiento de los estándares JTI
Mostrar más: SWI swissinfo.ch, certificado por la JTI
Puede encontrar todos nuestros debates aquí y participar en las discusiones.
Si quiere iniciar una conversación sobre un tema planteado en este artículo o quiere informar de errores factuales, envíenos un correo electrónico a spanish@swissinfo.ch.