Euro 2008: la policía en pie de guerra

La policía suiza ante los grupos de hooligans que aparecieron en las calles de Zúrich en octubre pasado. Keystone Archive

La policía tiene tres años para preparar el operativo de seguridad del Campeonato de Fútbol de Europa que se realizará en Suiza y Austria a partir del 7 de junio del 2008.

Se espera una nueva legislación que especifique la forma de combatir el hooliganismo y el establecimiento de medidas para la prevención de actos violentos con la excusa del balompié.

Suiza no tiene miedo de ser la anfitriona, junto con Austria, de la Eurocopa UEFA que tendrá lugar en 2008. «La policía está acostumbrada ha desplegarse durante el Wold Economic Forum en Davos y durante los partidos internacionales de fútbol», explica Martin Jäggi, jefe de la seguridad de la competición futbolística europea.

En opinión del también comandante de la policía cantonal de Solothurn, la posibilidad de que aparezcan actos violentos podría ampliarse en la etapa final del campeonato. «Esta competición deportiva es, ni más ni menos, la tercera más grande del mundo», recuerda.

El año pasado, en Portugal, la edición 2004 atrajo a un millón de espectadores, unos 38.000 asistentes en cada partido.

El problema del hooliganismo

La presencia de hooligans, dedicados más a provocar enfrentamientos que a mirar el partido, está al centro de las preocupaciones de seguridad.

Los actos violentos de los hooligans no son desconocidos en Suiza. Recientemente este tipo de casos aparecieron entre los seguidores del club de fútbol CF Basilea y los Grasshoppers de Zúrich.

«No me incomoda que estos incidentes se hayan producido ahora, y no más tarde. Es una oportunidad que nos permite evaluar las medidas apropiadas a tomar», como es la organización de talleres de prevención.

Sin embargo, el caso de los hooligans suizos debe ser una preocupación menor para la policía, ya que cada selección nacional atraerá la llegada de sus seguidores a las canchas austriacas y suizas.

Nueva legislación indispensable

A fin de elaborar su plan de seguridad, los dirigentes suizos y austriacos se inspiraron en las medidas adoptadas por sus colegas portugueses durante la Euro 2004 y en las emprendidas por los alemanes para la organización de la Copa Mundial de la FIFA 2006.

La próxima etapa será el establecimiento de una base legal en el Parlamento Federal, ya que actualmente no existe legislación alguna que permita sancionar los hechos violentos que emprenden los fanáticos del fútbol.

El jefe de la seguridad de la Euro 2008 estima que la policía estará lista a tiempo para vigilar el buen desarrollo de la manifestación. «Cuando la nueva ley entre en vigor, podremos hacer un registro de los hooligans suizos y extranjeros en una base de datos que constituirá un utensilio eficaz», indica Martin Jäggi.

«Planeamos que aquellos hooligans que sean reconocidos permanezcan en detención preventiva. Nuestra principal preocupación es que tengamos el espacio necesario», indica, aunque aclara que en ningún caso se construirán nuevas prisiones, sino que se planea retenerlos en sitios provisionales.

Por otra parte, el jefe de la seguridad en la competición indica que la policía, por sí misma, no puede prohibir el acceso de nadie al estadio. «Es una decisión que debe ser tomada por los propietarios del inmueble. Si queremos mejorar la seguridad, deberemos obrar en estrecha colaboración con ellos», apunta.

Y entre tanto, el tiempo apremia: el campeonato de fútbol de Europa iniciará el 7 de junio de 2008.

swissinfo, Scott Capper
(Traducido P.I.)