Poca nieve, pero los hoteles casi llenos
En estos días festivos ha hecho falta para muchos el paisaje nevado. Los prados cubiertos de nieve se encuentran sólo en las regiones alpinas, mientras que en las zonas bajas predomina la niebla.
La situación meteorológica no cambiará en los próximos días, aunque las estaciones turísticas aún se dicen satisfechas pues sólo pocas camas quedan disponibles en estas dos semanas de vacaciones en Suiza.
«El vasto anticiclón que recubre Europa entera mantiene sustancialmente sin cambios su acción en el clima de la región alpina», indica la previsión meteorológica que deja pocas esperanzas para los apasionados de los deportes invernales.
«Hay pocas posibilidades de que haya precipitaciones de aquí al miércoles próximo», afirma Christophe Salamin, meteorólogo de MeteoSuisse.
Condiciones que permiten prever que por lo menos hasta el próximo fin de semana permanecerá la situación climática actual en Suiza: buen tiempo sobre el arco alpino y niebla en los sitios más bajos.
El año pasado en el mismo periodo había mucho más nieve en las regiones montañosas, agrega Christoph Marty, climatólogo del Instituto Federal para el Estudio de la Nieve y de las Avalanchas en Davos, en el cantón de los Gritones.
En la Navidad 2005 se registró hasta dos o tres veces más nieve de la que hay actualmente.
A esto se agrega la inversión de temperatura de este año, un fenómeno bien conocido por los meteorólogos: mientras que en la planicie descienden las temperaturas, las montañas están bañadas de sol y con temperaturas casi primaverales.
Serenidad relativa
En las estaciones alpinas, los responsables del turismo locales se dicen satisfechos. Pierre-Yves Délèze, encargado de relaciones públicas en Verbier, cantón del Valais, se muestra «relativamente sereno». Si bien es cierto que las condiciones de nieve son menos favorables que de costumbre, casi la mitad de las pistas están abiertas a los esquiadores y la tasa de frecuentación en ellas es buena, asegura Délèze.
Además, aunque se registraron algunas anulaciones en las reservas de hotel, casi se puede hablar de lleno completo. «Las vacaciones de fin de año también son una oportunidad de encontrarse en familia y de disfrutar. Con el buen tiempo, las personas pueden esquiar medio día y después hacer caminatas o salir de compras», explica.
Una tendencia confirmada en Diablerets, en el cantón de Vaud. «Sólo hay algunos departamentos disponibles y hasta ahora no hemos tenido anulaciones de reservas», dice Cédric Fuhrer, asistente de la dirección de la Oficina de Turismo local.
Allí, la presencia del glaciar permite garantizar algunos descensos a 3.000 metros de altura para los amantes del esquí y la tabla de nieve.
Huéspedes fieles
En general, en las estaciones invernales helvéticas no hay mucho temor a quedarse sin clientes, confirma Edith Zweifel, portavoz de Suiza Turismo. Las reservaciones están al nivel de las del año pasado durante el mismo periodo vacacional y únicamente el turismo jornalero podría reducirse ante la falta de nieve.
Los huéspedes que van cada año a las montañas son clientes fieles y no todos acuden a ellas para hacer deportes invernales. Un estudio realizado entre 2004 y 2006 en la región de Villars-Gryon, en el cantón de Vaud, indica que un huésped de cada cuatro jamás se coloca sobre las pisas de esquí.
swissinfo y agencias
Este 2006 ha sido el quinto año más caluroso desde el inicio del incremento de las temperaturas, registrado desde 1861.
Sólo los años 1994, 2000, 2002 y 2003 registraron temperaturas promedio más elevadas que este 2006.
El clima más templado en los últimos años podría tratarse de un fenómeno temporal, pero la mayoría de los expertos lo observan como una consecuencia del sobrecalentamiento terrestre, causado por las emisiones de gases con efecto invernadero.
Este sobrecalentamiento ya ha contribuido a la pérdida significativa de la masa de hielo en los glaciares que se encuentran en el territorio helvético.
La falta de nieve en invierno es una amenaza para el futuro de las estaciones de montaña menos altas.
Los bancos suizos rechazan otorgar créditos para las instalaciones de esquí a una altitud inferior a los 1.500 metros. Ciertas pistas situadas por debajo de ese nivel ya han sido cerradas.
De acuerdo a la Oficina Federal de Estadísticas, los huéspedes extranjeros que visitaron Suiza en 2005 contribuyeron con 13.700 millones de francos, es decir, 621 millones (4,7%) más que en 2004.
En el mismo periodo los suizos que viajaron al extranjero gastaron 11.600 millones de francos. El saldo positivo a favor del sector turístico en Suiza fue de 2,200 millones de francos.
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