Visas, mayor control
El Ministerio suizo de Exteriores intensificó los controles de sus embajadas desde la puesta al descubierto de presuntos casos de corrupción.
Empero, los recortes presupuestales amenazan esas medidas por lo que la dependencia contempla solicitar un crédito suplementario.
En abril del 2005, la Comisión de Gestión del Consejo Nacional (cámara baja) solicitó explicaciones al Ministerio de Exteriores sobre los casos de presunta corrupción ligados a la entrega de visas.
Entre el 2004 y el 2005, el Ministerio Público de la Confederación abrió tres investigaciones relacionadas con las representaciones en Lima, Moscú y Nigeria.
Por su parte, el Ministerio de Exteriores (DFAE) lleva a cabo una investigación interna con respecto a un empleado local en Islamabad, Pakistán. A finales de mes, la dependencia decidirá si es menester aplicar medidas.
Por otra parte, desde que se dieron a conocer los supuestos casos de corrupción, el DFAE envía con mayor frecuencia a inspectores para el control de las actividades de las embajadas en las que la situación podría ser difícil, aun cuando no se hayan detectado indicios de fraude.
Para identificar mejor esas situaciones, el Ministerio estableció una clasificación de los riesgos de las diferentes representaciones, explica Martin Dahinden, responsable de la Dirección de Recursos y de la Red Exterior del DFAE.
Esta evaluación se basa en indicaciones tales como la presión migratoria de un país, la actividad ligada al crimen organizado o la trata de seres humanos.
Además, se hizo un exhorto a los jefes de las misiones para que se mantuvieran más atentos.
«En otros tiempos, el rubro de las visas era frecuentemente considerado como inferior al rango de un embajador. Ahora, los diplomáticos toman conocimiento de esos procedimientos y los controlan», apunta Martin Dahinden.
Transparencia
El principio de ‘cuatro ojos’, que supone que dos personas controlen los expedientes de entrega de visas, también fue reforzado.
Asimismo, el DFAE mejoró la concepción de algunas ventanillas, particularmente en Moscú, donde construyó un pabellón para los visados con espacios abiertos a fin de disuadir a cualquier persona mal intencionada, de sobornar a un empleado.
En algunos países, las personas que trabajan en las ventanillas sufren de una presión enorme, subraya, Martin Dahinden.
«Alguien que está dispuesto a arriesgar su vida atravesando el Mediterráneo en una embarcación de fortuna también está dispuesto a amenazar a un empleado de un consulado o a su familia. De cualquier forma eso no excusa los resbalones».
Insuficiente
Aunque reconoce algunos avances, el diputado radical Jean- Paul Glasson, preidente de la sub comisión de Gestión del Consejo Nacional (cámara baja) considera que las medidas instrumentadas son insuficientes.
Al legislador le gustaría que se incrementaran los dobles controles y que hubiera un mayor número de empleados suizos que, en su opinión, son menos sensibles a las presiones.
Pero el personal expatriado cuesta caro y el presupuesto 2006 de la Confederación amputó tres millones de francos a los gastos del DFAE. «Tenemos la intención de solicitar en los próximos meses un crédito adicional para emplear más personal suizo transferible», anuncia Martin Dahinden.
En sus 141 representaciones, el DFAE entrega más de 500.000 visas por año y rechaza unas 40.000.
Portavoz de la Oficina Federal de Migraciones (ODM), Dominique Boillat estima que el número de visas otorgadas deberá pasar a 400.000 tras la entrada en vigor del acuerdo de Schengen sobre cooperación policial en el 2008, en Suiza, puesto que las dobles solicitudes serán menos numerosas.
swissinfo y Anja Germond (ats)
En las 141 representaciones diplomáticas en el mundo, el Ministerio de Exteriores entrega más de 500.000 visas por año.
Rechaza alrededor de 40.000.
Con la entrada en vigor del acuerdo de Schengen sobre cooperación policial, se estima que el número de visas otorgadas descenderá a 400.000.
Desde la puesta al descubierto de casos de visas falsas, el Ministerio suizo de Exteriores ha intensificado sus controles para evitar nuevos casos de corrupción ligados a la entrega de visas.
Se ha introducido una serie de medidas en algunas ventanillas para disuadir cualquier tentativa de soborno.
Esas disposiciones están en riesgo merced al recorte presupuestal previsto por la Confederación, por lo que el Ministero de Exteriores prevé solicitar un crédito suplementario.
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