Holcim: bienvenida ley antimonopolios en Ecuador
El presidente ecuatoriano Rafael Correa acusa al grupo cementero helvético de encarecer artificialmente los precios mediante prácticas oligopólicas.
El gigante suizo rechaza ante swissinfo la validez de dichas aseveraciones y afirma que respaldará abiertamente una nueva legislación antimonopolios.
El año 2007 quedará grabado para Holcim Ecuador como uno de los más complejos en la historia que escribe desde más de ocho décadas.
El gobierno del presidente Rafael Correa, en funciones desde enero pasado, posee un corte humanista-cristiano –como se autodefine– y una visión de los negocios completamente distinta a la que defendía su antecesor, Alfredo Palacio (quien se negó sistemáticamente a pertenecer a algún partido político en particular).
Crítico de la dolarización, el neoliberalismo y las políticas del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial, Correa defiende la necesidad de recuperar esquemas de los 80 y fortalecer la función económica del Estado.
Una estrategia en línea con los gobiernos de Venezuela o Bolivia, pero ajena a los intereses de la iniciativa privada. Y el nuevo sector que tiene en la mira es el del cemento. Los dos gigantes corporativos contra los que vuelca sus críticas son la suiza Holcim y la francesa Lafarge.
Responsables de oligopolio
El pasado sábado (03.11.), Rafael Correa denunció en su programa radiofónico ‘El Presidente dialoga con el pueblo’ –transmitido por 54 emisoras en cadena nacional– que las actitudes oligopólicas de Holcim y Lafarge tienen dominada a la industria ecuatoriana del cemento.
«Nuestro cemento es extremadamente caro y la actitud oligopólica de Holcim y Lafarge genera indignación a los ecuatorianos. Holcim nos vende un cemento carísimo, estimamos de hecho que su índice de rentabilidad es de 100%», declaró.
«Por ello, anuncio que presentaré una iniciativa de ley ante el Poder Legislativo (Asamblea Constituyente) que castigue toda práctica monopólica y anticompetitiva».
El mandatario fue incluso más lejos al afirmar que su proyecto integral no se detendrá en la ley antimonopolios, sino que trascenderá a una alianza estratégica con algún otro grupo privado para constituir la ‘holding’ (empresa matriz) de una nueva cementera que les haga competencia para obligarles a bajar sus precios.
Desde la visión de Correa, la industria cementara que hoy enriquece a Holcim en Suiza fue adquirida en los 90 «a precio de gallina enferma» por un grupo de empresarios de Guayaquil que apenas un año después estaba vendiendo el negocio a Holcim y Lafarge.
No permitiremos, enfatizó, que manipulen precios clave para el desarrollo como el del cemento.
Holcim saluda la iniciativa
Entrevistado por swissinfo sobre la iniciativa del gobierno de Ecuador, el portavoz de Holcim en Suiza, Peter Gysel afirma:
«Nos gustaría hacer algunas respetuosas puntualizaciones. La primera, Holcim Ecuador, antes Cemento Nacional (y llamada en sus inicios Industrias y Construcciones) fue fundada en 1923 por un grupo de empresarios locales y jamás ha pertenecido al Estado».
Sin embargo, es cierto que a partir de los años 70 la Corporación Financiera Nacional (CFN), instituto ecuatoriano de inversión pública, se convirtió en uno de los inversionistas del grupo. No obstante, a partir de 1993 su participación en lo que entonces era Cemento Nacional se ha reducido paulatinamente para pasar del 47% hace 15 años a prácticamente cero hoy en día, según Gysel.
«Y la transacción de acciones que valida la decreciente participación de la CFN en Cemento Nacional fue estrictamente regulada por las autoridades. Pero si el gobierno en funciones siente la necesidad de investigar dicha operación, cuenta con Holcim Ecuador para todo lo que requiera».
Para el directivo de Holcim Suiza la presentación de una iniciativa de ley antimonopolios –hasta ahora inexistente en Ecuador-, lejos de representar un riesgo resulta algo positivo.
«Sería una legislación benéfica para los participantes del sector cementero y para todas las actividades productivas en general», sostiene.
Precios y conducta
El presidente Rafael Correa asegura que los elevados precios del cemento ecuatoriano se deben a una serie de acuerdos ocultos e ilegales entre Holcim y Lafarge.
Actualmente, el precio del cemento ecuatoriano ronda los 7,5 francos suizos por quintal (45,3 kilogramos) –medida de referencia que se utiliza en el sector–, un nivel parecido al que existe en el resto de América Latina.
Sobre este punto, Peter Gysel asegura que «Holcim conduce todos los negocios que realiza en Ecuador en estricto apego a un Código Interno de Conducta que prohíbe terminantemente cualquier acuerdo de precios con la competencia».
Asimismo recalca que los precios del cemento, lo mismo en Ecuador que en el resto del mundo, reflejan la relación entre la oferta y la demanda.
«Aún así, tuvimos la oportunidad de demostrar a principios de 2007 que el cemento ecuatoriano era más barato que el que se comercia en cualquier país de Europa o incluso de Sudamérica. Y es importante destacar que los precios del sector van a la baja».
Finalmente, con respecto a la crítica que vertió el gobierno ecuatoriano contra los abultados beneficios que reciben los accionistas de Holcim Ecuador, Gysel asegura que la compañía está obligada, como cualquier otra del mundo y de cualquier sector, a generar dividendos a sus accionistas.
Y 1.000 de los accionistas más importantes de Holcim Ecuador son personas e instituciones locales.
La iniciativa de ley del presidente de Correa se espera para los primeros días de enero, y su desenlace cambiará, sin duda, el desempeño de Holcim en el país latinoamericano.
swissinfo, Andrea Ornelas
Grupo Holcim factura más de 23.000 millones de francos suizos al año y emplea a 90.000 personas en los cinco continentes.
Holcim Ecuador tiene 845 empleados con los que opera: 1 planta de cemento, 1 molienda de cemento, 8 plantas de hormigón y 3 plantas de agregados.
Con 44 años de edad, el presidente ecuatoriano Rafael Correa es uno de los 10 mandatarios más jóvenes del mundo.
Holcim es la segunda cementera más rentable del mundo después de la francesa Lafarge.
Holcim se dedica a la comercialización de cementos y agregados de la construcción como piedra caliza, arena y grava.
Antes de denominarse Holcim Ecuador, la filial ecuatoriana sufrió una larga metamorfosis, cambió de dueños y llevó los nombres de Compañía Anónima de Industrias y Construcciones (1923) y Cemento Nacional (1948).
Ecuador fue una de las pioneras de la industria del cemento en América Latina, sólo antecedido por Cuba (1918) y Argentina (1919).
Hasta el siglo XVIII, el cemento que se utilizaba para las construcciones europeas era denominado romano o natural, una mezcla de piedras calizas y arcilla que integraban a partir de procedimientos rudimentarios.
El cemento era un insumo escaso, ya que había poca materia prima disponible para fabricarlo.
Durante la industrialización del Viejo Continente, el cemento Pórtland o artificial vino a sustituir a su predecesor.
Fue creado en Gran Bretaña a partir de la calcinación de piedras calizas, mucho más resistentes que el cemento natural, lo que facilitó la expansión de la construcción y el desarrollo económico de Europa.
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