¿Suiza, «santuario» para perseguidos políticos?
La idea surgió durante los festejos por el XXX aniversario de las Brigadas Internacionales de Paz, en Ginebra. Ahí, ante especialistas en derechos humanos de diversas partes del mundo, Berna anunció que fortalecerá su política del rubro. Recogió propuestas:
“Suiza debería crear un sistema de santuario para que los defensores de derechos humanos en riesgo vengan un tiempo determinado antes de poder regresar a su lucha”, recomendó Eric Sottas, fundador y antiguo secretario general de la Organización Mundial contra la Tortura.
¿Una utopía?
“En los años 80, cuando estaba en Guatemala, no soñé que llegaría la paz y que las personas que acompañábamos estarían un día en el Parlamento”, confesó Liam Mahoney, del Comité de Desarrollo Estratégico de las Brigadas Internacionales de Paz (PBI). Sin embargo, esos defensores de los derechos humanos llegaron al legislativo de su país.
¿Custodiar a los activistas que luchan por las garantías individuales? “Hace treinta años nos decían que era una locura, que no era posible, pero PBI ha demostrado que se puede lograr”, añadió. “Una de las lecciones de todos estos años es que debemos tratar de hacer lo que piensan todos que es imposible”
Los pronunciamientos de uno y otro tuvieron lugar en el marco de la Conferencia ‘La Protección de los Defensores de los Derechos Humanos. ¿Cómo pueden contribuir a su protección los mecanismos internacionales’, que tuvo lugar el jueves 19 de octubre en la ciudad de Calvino.
En Suiza, mandato constitucional
En ese marco, especialistas de los diversos confines del planeta narraron sus experiencias y analizaron los riesgos que acechan a los activistas, perseguidos, estigmatizados y criminalizados.
El embajador Claude Wild, responsable de la División IV de Asuntos Políticos (Seguridad Humana) del Ministerio suizo de Exteriores, informó que Berna elabora directrices para reforzar sus mecanismos de protección con el concurso de sus embajadas.
“El artículo 54 de nuestra Constitución establece la promoción de los derechos humanos y es algo que siempre recuerdo en el Parlamento cuando algunos pretenden defender más bien el presupuesto”, enfatizó.
Se refirió igualmente a la Primavera Árabe y dijo que es una muestra evidente de lo que se puede lograr mediante un compromiso con los derechos humanos. Y para fortalecer ese compromiso, Suiza va a dotarse de lineamientos específicos.
“Tenemos un proyecto en el Ministerio de Exteriores de elaborar líneas directrices para nuestras embajadas. La idea es que en el futuro puedan ofrecer un apoyo aún mayor a los defensores de derechos humanos”, precisó luego en entrevista con swissinfo.ch.
Urge una acción más contundente
“Si queremos ser creíbles en nuestra voluntad de poner realmente la defensa de los derechos humanos como prioridad de nuestra política exterior, tenemos que proporcionar a nuestras embajadas instrumentos de acción y recomendaciones de cómo abordar ese trabajo que va más allá de la labor habitual”, puntualizó.
La estrategia buscaría armonizar medidas, instruir a las representaciones oficiales helvéticas sobre la manera de establecer contacto con los defensores; mantener una red con ellos; efectuar desplazamientos a provincia y no meras actuaciones desde las capitales, establecer consultas con la sociedad civil, con expertos de organismos internacionales y ONG como PBI.
Y justamente, con base en este último propósito, Berna recogió las recomendaciones de los participantes en la conferencia. Más precisamente, de aquellos que tomaron parte en uno de los tres talleres del encuentro, a saber: ‘El involucramiento suizo en los mecanismos de protección internacionales para los defensores de los derechos humanos’.
Resistencias en Suiza
Entre otras recomendaciones, los expertos se pronunciaron porque las directrices suizas pongan énfasis en la protección de defensores de los sectores más vulnerables: mujeres, poblaciones rurales, LGBT (lesbias, gays, bisexuales y personas transgénero). Por el envío de personas con experiencia en derechos humanos a las embajadas de los países en situaciones difíciles. Por el intercambio continuo y oportuno de informaciones. Por la creación de redes de apoyo con ONG, mecanismos internacionales y otros países.
“Suiza tiene una amplia experiencia en el campo de los derechos humanos y puede desempeñar un papel fundamental porque cuenta con el respeto de las ONG”, apuntó Eric Sottas. Empero, advirtió, también tiene que luchar con resistencias internas. “Me desilusionó el silencio del gobierno durante la campaña, no solamente en Colombia, sino también aquí, en la que acusaron a defensores de derechos humanos de ser miembros de las FARC”.
Para el experto suizo, Berna debe mantener una misma línea de lucha tanto en el exterior como dentro del país.
“Aquí, Suiza debería crear un sistema de santuario para que vengan por un tiempo determinado las personas que estén en riesgo. Un tiempo no limitado, pero tampoco permanente. El tiempo que necesiten antes de volver a su lucha”.
PBI es una ONG internacional que fomenta la no violencia y protege los derechos humanos desde 1981.
Los fundadores de PBI compartían una profunda convicción: cualquier persona puede adoptar medidas que ayuden a detener guerras o violaciones de los derechos humanos, aún cuando sus gobiernos no puedan o no quieran.
El principal enfoque del trabajo es el acompañamiento internacional, una técnica en la cual PBI fue pionera.
Se utiliza para proteger a los defensores de los derechos humanos amenazados.
En 2010, PBI brindó protección y apoyo a 170 mujeres y 197 hombres defensores de derechos humanos de 49 ONG.
En conjunto, estas organizaciones apoyaron a miles de mujeres, hombres y niños a quienes se les han negado sus derechos básicos, desde la expulsión de sus tierras por la fuerza hasta la “desaparición” de miembros de sus familias y la tortura y la violación en manos de las fuerzas armadas.
Actualmente. PBI tiene proyectos en Colombia, Guatemala, México y Nepal. Estudia la ampliación de sus actividades sobre el terreno a Honduras y Kenya.
Para celebrar su XXX Aniversario, Brigadas Internacionales de Paz reunió a defensores (as) de Derechos Humanos, a organizaciones de la sociedad civil que trabajan en su protección, a responsables de formular políticas, especialistas gubernamentales en el rubro y a personal de las Naciones Unidas (ONU).
Los participantes compartieron ideas y experiencias sobre las distintas formas de mejorar la prevención de ataques contra activistas de DD HH y la protección de los (as) mismos (as).
Con las recomendaciones que surjan a lo largo de las tres conferencias (en Suiza, Alemania y España) , PBI elaborará un informe cuyo objetivo será el de mejorar la efectividad de los mecanismos de prevención y de protección existentes en el área de los derechos humanos.
En cumplimiento de los estándares JTI
Mostrar más: SWI swissinfo.ch, certificado por la JTI
Puede encontrar todos nuestros debates aquí y participar en las discusiones.
Si quiere iniciar una conversación sobre un tema planteado en este artículo o quiere informar de errores factuales, envíenos un correo electrónico a spanish@swissinfo.ch.