El mensaje humanitario de Suiza
Estado depositario de los Convenios de Ginebra, Suiza insiste particularmente en el respeto a los civiles en la ofensiva contra Irak.
Un mensaje igualmente reiterado por el CICR y el conjunto de las organizaciones humanitarias.
El presidente del CICR no perdió tiempo. Jakob Kellenberger habló a la prensa el jueves por la mañana, menos de tres horas después de los primeros ataques contra Bagdad.
Esta comunicación precoz tendía a recordar públicamente a los beligerantes que la guerra no autoriza el empleo de cualquier método.
«El CICR recuerda a los gobiernos de Irak, de Gran Bretaña y Estados Unidos su obligación de respetar los Convenios de Ginebra, que han firmado todos», declaró Jakob Kellenberger.
Las reglas de la guerra
Esos tratados internacionales tienden, en efecto, a limitar los horrores de la guerra. «Los ataques contra los civiles están prohibidos, lo mismo que aquellos que no distinguen entre los objetivos militares y los civiles», subrayó el presidente del CICR.
La organización humanitaria recordó igualmente que las armas de destrucción masiva, químicas y biológicas están formalmente prohibidas.
Y eso no es todo. «Las partes en conflicto tienen el deber de responder a las necesidades fundamentales de la población civil», precisa el CICR.
Prácticamente, eso significa que los beligerantes no deben obstaculizar la acción de los organismos humanitarios sean del CICR o del conjunto de las agencias de la ONU implicadas en el conflicto.
Esos principios esenciales constituyen igualmente el eje mayor de la diplomacia helvética.
Un pilar de la diplomacia suiza
Desde su llegada a la cabeza del Ministerio de Asuntos Exteriores, Micheline Calmy-Rey ha hecho todo lo posible por introducir el derecho humanitario en la agenda de los protagonistas de la guerra en Irak.
El jueves, la ministra precisó que ese objetivo se mantendría, a través de los embajadores suizos en los países implicados en las hostilidades.
Ese llamado al orden humanitario puede parecer vano. «Las consecuencias de una guerra son siempre dramáticas, en particular para las poblaciones civiles», reconoció Jakob Kellenberger.
En su alocución televisada, George Bush aseguró: «Quiero que los estadounidenses y el mundo entero sepan que las fuerzas de la coalición harán todos los esfuerzos posibles por evitar a los civiles inocentes».
El seguimiento de las operaciones militares confirmará a no la sinceridad de sus palabras.
Un exhorto planetario
Pero el presidente de la primera potencia mundial no puede ignorar completamente las opiniones públicas, comenzando por la de su país.
Es, en todo caso, el mensaje que intentan transmitir las manifestaciones contra la guerra que tienen lugar en diversas partes del planeta.
swisssinfo, Frédéric Burnand
(Traducción Marcela Águila)
El CICR pide 108 millones de francos suplementarios a los países donadores.
La Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, solicita, por su parte, 111 millones de francos.
En suiza, la ‘Chaîne du Bonheur’ lanza una campaña para recaudar fondos en favor del pueblo iraquí.
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